martes, 26 de diciembre de 2023

Oda a la rutina

 

Los que hemos estado siempre en un lado no podemos evitar preguntarnos cómo sería estar enfrente. ¿Qué sentirán los altos viendo el mundo desde su perspectiva aérea y llegando a todas las baldas de la cocina? ¿Los multimillonarios tienen algún problema o todo lo arregla el dinero? ¿A los que su cuerpo no les pide bollos y chocolate 24/7 sufren menos?

En temas romanticones esto pasa mucho. El que siempre está en relaciones largas y estables envidia al típico follarín de los bosques y el picaflor que lleva años saltando de liana en liana se ha pegado tantas leches y seguramente le han tratado tan mal que solo quiere un poco de paz y tranquilidad.

Y ahí voy yo, a la ausencia de cambio. La rutina tiene muy mala fama en el amor. La monotonía y el aburrimiento matan la chispa, dicen. Pero sin un poco de sosiego, de calma, sin darle un mínimo de tiempo, ¿cómo va nada a consolidarse, a crecer? ¿Cómo va a formarse un vínculo profundo que resista?

Las canciones suelen hablar de los extremos, de cuando nace y la intensidad te hace estallar el corazón y del final, cuando te lo pasa por la picadora para dejártelo hecho puré. Menos cuentan lo del medio, el reposo, la serenidad, la placidez. El descanso de no tener que saltar de liana en liana o esquivar golpes a todas horas. No quiere decir que no los haya, pero es más fácil saber de donde te vienen.

Por eso he puesto la canción de arriba. No es que esta chica sea una poetisa precisamente, pero está enamorada, se le nota y me gusta como dice algunas cosas. Os las dejo por aquí.

"Ya hemos agotado las primeras veces"
"Podría tener un máster sobre tus manías"
"Brindemos por volvernos tan típicos"
"Érase una vez sin final"
"Dicen que el primer beso siempre es el más mágico Pero es más mágico saber que no es el único" 

Me voy unos días de excursión. Por si no nos leemos antes

¡¡FELIZ AÑO!!

domingo, 17 de diciembre de 2023

Sitcomeando por la vida

Yo siempre he creído que la realidad supera a la ficción. Más aún desde 2020 en el que el CoronApocalipsis dio el pistoletazo de salida a una serie de acontecimientos históricos, sucesos surrealistas y situaciones flipantes que nos hicieron sospechar que somos el Netflix de los marcianos. Primero pensábamos que estábamos en una película y luego nos dimos cuenta de que era más bien una serie. En la primera temporada empezamos fuerte con el bichillo del demonio. La segunda mantuvo el nivel con filomenas y asaltos al capitolio varios y cuando parecía que la trama empezaba a flojear la tercera reflotó con volcanes y movidas naturales tochas. Un no parar.

Después de tantas emociones la cosa siguió intensa, aunque menos llamativa. Aún así pasan cosas días sí y día también que hacen mirar alrededor buscando la cámara oculta, porque parece imposible que eso pase en la vida real, que no sea fruto de la imaginación de un guionista o escritor. ¿Un ejemplo reciente? Ladridos en el Parlamento europeo jusssssssto cuando interviene "Perro Sánchez".


Que piensas, a ver si nuestra serie ha dejado de funcionar como historia de aventuras y hemos virado a una sitcom tipo The Office, pero sin tanto mirar a cámara.

A estas alturas del partido y tal y como está la cosa, no me extrañaría ni un poco...

domingo, 10 de diciembre de 2023

Puente casi peliculero

Estos días he estado de puente. Tenía pensado programar una entrada para no dejar esto abandonado tanto tiempo y para intentar, al menos, acercarme a la mitad de la meta de actualizaciones anuales que me había propuesto. Por lo visto, mi inutilidad tecnológica va a hacer imposible ambas cosas. Corramos un ESTÚPIDO velo.

Total, que he estado de puente en un pueblito típico de montaña con la estampa más típicamente invernal de película cutre navideña de sobremesa que os podáis imaginar. Y no lo digo en plan mal, ¿eh? Qué va. De hecho, me hacía ilusión. Hasta me había comprado un outfit al efecto. Y allí que me fui, con mi gorro de lana y bufanda rosa fosforito, mis botas con forro de borreguillo y mis 3500 jerséis gordos, al más puro estilo de Cameron Diaz en The Holiday.

Si no sois nuevos en este blog, ya supondréis que las semejanzas con cualquier trama de película romántica navideña se acaban aquí. Este finde no he conocido a ningún atractivo veterinario viudo con una hija encantadora, ni he renunciado a ningún ascenso en mi carrera para reencontrarme con la felicidad de la vida sencilla, ni he vuelto a conectar con mi amor del instituto que ahora es bombero voluntario y el alcalde de pueblo más comprometido con sus vecinos del mundo. 

Nieve ha habido (un poco). Y chocolate caliente con nubecillas (bastante más). Y aparte de eso sólo puedo enumerar algunos de los descubrimientos de estos días, que ningún guionista querría incluir en su christmas film ni de coña, supongo.

-Si te pones mala y no tienes drogas legales que te alivien, prueba con panettone de Lacasitos. Mano de santo. Baja la fiebre, quita la tos y hace desaparecer el dolor de garganta por arte de magia. No se como no lo ponen  en el vade mecum porque mucho más efectivo que el paracetamol y el ibuprofeno y sin tantos efectos secundarios.

-La nieve resbala. El barro resbala más. Si tienes pensado empezar tu carrera de patinaje artístico, mejor hazlo con protecciones y en pista de entrenamiento. Para los demás escenarios, busca un calzado que agarre bien en el suelo.

-Maleta pequeña + ropa de invierno que ocupa mucho espacio= pocos outfits disponibles. Ensuciarlos todos el primer día te lleva a parecer una pordiosera el resto del viaje y a anular tus posibilidades de emular a cualquier prota de historia navideña.

-Creer que el incontrolable estilismo capilar deja de ser un problema cuando se lleva gorro es de una ingenuidad muy tierna que cae por su propio peso cuando entras a cualquier sitio con calefacción y te lo quitas. Pensar dos veces esta cuestión habría ahorrado alguna que otra situación incómoda. Y mirarse en el espejo también. Pero no le pidamos peras al olmo, claro.

Ya que todo parece indicar que no he comenzado este puente una meteórica carrera en la pantalla grande (ni en la pequeña de las pelis de sobremesa) mañana no me queda otra que ir a currar, así que os deseo una buena semana. Que la fuerza os acompañe en la vuelta al cole. Y por la sombra, bombones.

jueves, 30 de noviembre de 2023

Una entrada me manda hacer Violante

"Un soneto me manda hacer Violante
que en mi vida me he visto en tanto aprieto;
catorce versos dicen que es soneto;
burla burlando van los tres delante.

Yo pensé que no hallara consonante,
y estoy a la mitad de otro cuarteto;
mas si me veo en el primer terceto,
no hay cosa en los cuartetos que me espante.

Por el primer terceto voy entrando,
y parece que entré con pie derecho,
pues fin con este verso le voy dando.

Ya estoy en el segundo, y aun sospecho
que voy los trece versos acabando;
contad si son catorce, y está hecho"

Me pasa como al buen amigo Lope, que tengo que escribir aquí, TENGO QUE ESCRIBIR, y no tengo ni repajolera idea de sobre qué. Y por enésima vez iba a hacer lo que él, hablar sobre el proceso, sobre las dificultades, sobre las falta de inspiración, sobre la desesperación del folio en blanco. Y entonces he pensado, ¿para qué si siempre hay alguien que ya lo ha hecho antes y, desde luego en el caso de Lope, mejor?

Así que eso, hoy le cedo la pluma a los que saben del tema tanto como el mismísimo Fénix de los ingenios.


Buen finde y por la sombra, bombones.

viernes, 24 de noviembre de 2023

Agujerofobia

 "El amor no termina, aunque una historia sí lo haga. De eso se trata: no de esquivar esos agujeros, sino de saber dónde se encuentran y seguir tu camino sin miedo a caer en ellos, es decir, aprender a vivir con los finales sin renunciar a otros principios". 

 

"Días sin ti", Elvira Sastre

 

Hace mucho mucho tiempo, en un país muy muy lejano, trataba de sobrevivir al sufrimiento una superheroína herida en lo más profundo de su corazón. Soportando el despiadado azote de una angustia huracanada y levantando las manos al cielo como una Scarlett O' Hara del reino de las hadas, aquella superheroína a Dios puso por testigo que nunca más volvería a ilusionarse, a creer en el amor, a participar en esa peligrosa gymkana al más puro estilo Humor Amarillo que son las relaciones románticas. No se veía capaz de levantarse de nuevo si volvían a derribarla y se retiró de la competición. Sin más.

Después pasaron los años, el huracán de las tristeza fue amainando y el miedo al dolor bajó de intensidad. La superheroína nunca se planteó volver a jugar, pero sin darse cuenta dejó de alejarse de las canchas deportivas, de evitar los eventos lúdicos, de esquivar los riesgos. Y la vida, que da muchas vueltas y es muy sabia, volvió a meterla en el combate. De repente y sin preguntar.

Y en medio del partido, sin plan ni entrenamiento previo, la superheroína sólo puede pensar en cuál será el siguiente golpe que la alcance y de donde vendrá. Si la bola gigante la tirará al agua o las cuchillas giratorias le afeitarán el flequillo o se le hundirá la pierna en arenas movedizas. No es capaz de levantar la vista y disfrutar del paisaje, necesita vigilar el suelo para tratar de evitar tropiezos.

Y es que, al final, todo se reduce a la gran pregunta:

 

¿Cómo se pierde el miedo a los agujeros?


domingo, 19 de noviembre de 2023

El asco padre

Me tropecé el otro día con un video de Gloria Fuertes de hace tropecientos años y gracias a esta señora polivalente y talentosa ya tengo mi nueva frase favorita: Esto es el ascopadre




Una palabra que retrata y resume a la perfección la avalancha de sentimientos negativos que me producen muchas de las cosas que pasan de un tiempo a esta parte. En el mundo, en España y en mi vida en general hay un montooooon del temas que son EL ASCO PADRE. No son sólo malas o muy malas, o desesperantes, o injustas o persistentes o desgastantes o drenantes. NO. Son, simple y llanamente, EL ASCO PADRE.

No me voy a poner a hacer una lista porque sólo tenéis que abrir un periódico o ver un informativo para que desfilen ante vuestros ojos los enormes carteles de neón que marcan los asuntos inscritos en esta categoría. Cosas que en algún momento, quizá hace no tanto, te dieron rabia o miedo o te angustiaron o provocaron que te murieras de preocupación. Todo eso, macerado con la persistencia en el tiempo, la manipulación interesada y la falta de esperanza en una próxima resolución, convierte esos sentimientos o la mezcla de ellos en el ASCO PADRE, una sensación más allá de la repulsión, flanqueada por la desesperación y el tedio.

Así que oyes las noticias y piensas, ¡qué asco padre todo! Y miras el calendario, ves que mañana es lunes y repetid todos conmigo...

¡¡MENUDO ASCO PADRE!!

jueves, 16 de noviembre de 2023

Si me queréis, ¡¡irse!!

El tema que me lleva de cabeza en los últimos años es la falta de tiempo. Que nunca es que me hayan cundido a mi mucho los días, bien es verdad, pero es que desde el coronaApocalipsis no consigo hacer nada de nada de lo que me gustaría. Este es un fenómeno, que como dirían los pijos, tiene causas multifactoriales, es cierto, pero desde luego una de las que más pesa es el horario de mi curro actual. En este momento soy de las afortunadas que disfrutan de una jornada partida extra maxi super delux, de esas que están tan rematadamente mal distribuidas que sales de casa a las 6 de la mañana y vuelves a las 10 de la noche. Una verdadera maravilla tan estupenda como suena.

A duras penas logro meter en los huecos inservibles que este infierno-horario tiene en medio mis tareas diarias, como para conseguir encajar hobbies, vida personal y asueto. Por dar datos concretos y seguir con el vocabulario técnico-pijo: mi tasa de éxito en este objetivo está entre el el 0 y el 0,2 %. El horror, vaya.

No tener tiempo para NADA me DESESPERA, así que intento hacer alguno de mis pendientes en los ratos muertos de mi curro y esto, lejos de paliar mi desesperación, la multiplica por mil porque es que NO HAY MANERA, macho, de verdad. No hay forma humana de que me dejen tranquila. No pasan cinco segundos sin que venga alguien a darme la turra con algo. Qué barbaridad, en serio, no había visto cosa igual en los días de mi vida.

No me entendáis mal, no me quejo del bombardeo de tareas laborales, que para algo me pagan, sino del asedio continuo e inmisericorde con movidas que no son mi trabajo y que no me interesan un mierdo. Conversaciones banales, desahogos, muchas opiniones y sesudos estudios científicos caseros sobre el clima, muchísimos intentos de endosarme marrones que no son de mi negociado... Miles y miles de chapas que me como contra mi voluntad a todas horas y que no me dan dos minutos seguidos de margen para hacer nada. Aunque sólo sea disfrutar del silencio.

No os confundáis, soy una persona sociable, me gusta hablar por hablar, comentar nimiedades, alternar. Pero todos tenemos un límite. Por cargadas hasta los topes que lleve las baterías de amabilidad y buen rollismo, no hay quien aguante ese embate continuo, ese asalto permanente, ese ataque masivo ininterrumpido que no respeta ni siquiera las pausas humanitarias. El incesante diluvio de intrusiones va a acabar conmigo. Por favor, por piedad, POR COMPASIÓN, ¡¡dejadme en PAZ!! ¡¡SI ME QUERÉIS, IRSE!!


Cuando SpeedyMum me pregunta que tal ha ido de curro del día, mi respuesta suele ser: Pues no ha habido muertos porque en el supermercado no venden rifles. Pero estoy serena y sosegada, ¿eh? No os preocupéis.

lunes, 13 de noviembre de 2023

¡Revolución!

No sé bien cuál es el nuevo objetivo de mi síndrome premenstrual. Porque antes estaba claro que intentaba con todas sus fuerzas que me cortara las venas, en venganza por el desperdicio de varias décadas de óvulos, supongo. Me imagino a mis hormonas indignadas pero serenas, circunspectas, distribuidas ordenadamente como el jurado de "12 hombres sin piedad". Y la portavoz leyendo el veredicto:

-"Por tanto, en vista de la ineficacia reproductiva de la hospedadora a causa de la cual se han perdido cientos de proyectos de cigotos y bebés en potencia, condenamos a la acusada a la pena capital. Y como no se merece ni el gasto en un verdugo que la ejecute, disponemos que ella misma acabe con su vida por el método que prefiera. Así nadie podrá acusar a este tribunal de ensañamiento ni falta de misericordia".

Luego el plan no les ha salido del todo bien, porque mes tras mes me resisto a cumplir la pena, los ánimos se han debido de ir caldeando -supongo- y han decidido endurecer mi castigo. Ahora no quieren que me mate yo, eso sería demasiado clemente pata mí. Ahora su plan es que me cargue a otro, me metan en la cárcel y acabe mis días triste, encerrada y sola, maldiciendo mi trágico final. De hecho, me imagino a mis hormonas anegadas por la rabia, fuera de sí, prácticamente al borde del delirio apretando como locas las tuercas de mi ánimo y de mi mente, mientras tratan de liberar a mi monstruo de los ojos rojos. Y la líder de estas pedazo de cabronas arengándolas con un megáfono:

-"Compañeras, apretad, esta perra capitalista nos ha tenido esclavizadas durante años planificando periodos menstruales que no se han utilizado nunca para nada. Si los hubiéramos gestionado nosotras, la pirámide de población de España se habría invertido gracias a los miniSpeedys que habría salido del aparato reproductor de la hospedadora. Abajo capitalistas explotadoras, el útero para quien lo trabaja".

Así que aquí estoy, usando hasta el último miligramo de fuerza de voluntad de mi cuerpo para no cometer asesinato, mientras pienso que es lunes otra vez (¡¡OTRA VEZ!!) y que ésta es la definición perfecta de mi estado de ánimo.



¿Vosotros qué tal?

domingo, 5 de noviembre de 2023

Trolas meteorológicas

 


Este es mi problema, que veo el mundo como soy yo. Y, aunque intento recordar que no es así, pienso que toda la peña va a actuar como yo lo haría. Por eso me creo que nadie va a pegarle una paliza a alguien indefenso, ni va a agredir de ninguna manera a un niño. Que la gente no va a poner zancadillas para medrar, ni a decir una cosa y a hacer otra, ni a arrimarse al sol que más calienta. Me parece imposible que alguien mienta para no dar la cara, para conseguir lo que quiere o porque, simplemente, le es más cómodo así.

No hagáis eso, no metáis bolas. Somos muchos los que nos tragamos que llueve si decís que está lloviendo. Sed valientes, echadle un par y decid la verdad. Es lo mínimo que todos nos merecemos.

viernes, 27 de octubre de 2023

Gusanos voladores

"Cuando se abre el capullo, el ser que sale ya no es un gusano, sino una mariposa. ha habido no sólo un cambio, sino una verdadera transformación. Desde la identidad del gusano, aunque él no lo supiera, volar era una posibilidad. Sin embargo sólo su transformación en mariposa ha hecho que esa posibilidad se despliegue como una extraordinaria realidad."

("Reinventarse. Tu segunda oportunidad", Mario Alonso Puig)

Muchas ideas interesantes en este libro. La que más, seguramente, que alcanzar tu mejor versión no va de cambiar lo que ya eres sino de ampliar la forma en la que te ves a ti mismo, librarte de la cárcel diminuta en la que nos encierra a todos nuestra percepción de nosotros mismos.

No somos SÓLO lo que creemos que somos. Somos más. O distinto. Sólo que no podemos verlo porque nuestra percepción nos limita sin que seamos conscientes de ello. "O salimos de nuestra manera limitada de pensar o seremos incapaces de ver las cosas desde esa perspectiva que nos va a permitir descubrir puertas donde antes solo veíamos muros".

¿El problema? Pues eso, que no nos damos cuenta de que estamos constreñidos porque el inconsciente es un perraco del infierno. Pero un perraco muy poderoso, así que no queda otra que entenderse con él. "El consciente sería como el capitán del barco y el inconsciente como el viento que impulsa las velas. O el capitán aprende a entender el viento y usarlo a su favor, o no llegará muy lejos."

Hay una buena noticia, al menos. Tenemos un arma: la atención. Nuestra capacidad de manejarla. "Recuerde que donde vaya su atención irán sus emociones y su energía. Donde ponga su atención se hará siempre más real para usted".

Puede que seamos diminutos gusanos, sí, pero tenemos dentro la capacidad de volar en potencia. Sólo tenemos que darnos cuenta, creernoslo y arriesgarnos a saltar

Fácil de decir, difícil de hacer.

jueves, 19 de octubre de 2023

Programa de actos

 

 

No creo que le descubra nada a nadie si digo que @randomboxhere es una de las mejores cuentas de Insta. Desde luego, es mi espíritu animal hecho de muñecajos blancos achuchables y cerebros rosas tan preciosos como malvados. Sus dibujos nos acribilla con dolorosas verdades sobre la vida adulta y la salud mental una detrás de otra. Me liaría a poner viñetas suyas aquí y no acabaría, así que os pongo la de arriba a modo de resumen Ese podría ser perfectamente el programa con el que mi mente me torpedearía un día cualquiera si cambiamos Barbie Girl con el último hit de Shakira.

¿Vosotros os libráis?

sábado, 14 de octubre de 2023

HACER LO QUE ME SALGA DE LAS CANCIONES

 

"Tengo un plan perfecto que me gusta si es contigoDe todas las noches acabar muerto de lo mucho que vivimos
(...)
Por si mañana me prohíben darte un besoVoy a correr hasta tu puerta y ganarle tiempo al tiempoNo te quedes ahí mirando que la vida es un conciertoY solo quedan dos canciones que están hechas para ti
(...)
El único secreto es hacer lo que sientoSin que nadie me diga lo que debo o no deboSin tantas complicaciones, sin reglas ni opinionesPorque yo quiero hacer lo que me salga, me salgaMe salga de las canciones
(...)
Prohibido quedarse ahí (ih-ih-ih)Viendo la vida pasar (ah-ah-ah)"

Pues eso, lo que dice Antoñito Molina. A pasar buen finde. Y por la sombra, bombones.

viernes, 6 de octubre de 2023

YoutubeTurra

Madre del amor hermoso. ¡MADRE DEL AMOR HERMOSO! Casi no llego a escribir esta entrada. Por poco me rindo y lo dejo por imposible. La virgen, qué suplicio.

No sé si es que hacía mucho tiempo que no me metía en Youtube por las mañanas. O igual no depende de las horas, sino de los días, pero de verdad que me he quedado flipada con la formidable, colosal, exorbitante, ¡¡ESTRATOSFÉRICA!! intensidad de los anuncios de los videos. ¡Oshtiashh (dicho con el acento del pato Donald de Citroën), qué turra!

Pero increíble, ¿eh? En serio. ¿Esto os pasa también a vosotros? ¿Y como lo soportáis? Porque yo necesitaba ver un video de 20 minutos para una cosa y si me salta una vez más lo de vender perchas en Amazon de verdad que me tiro por el balcón. Que no exagero, me repiten de nuevo lo de los ingresos pasivos y me corto las venas para acabar con mi sufrimiento.

Está claro que en algún manual famoso de publicidad pone que reiterar mucho el mensaje anima al consumo porque se hace en radio y TV, pero es que Youtube sobrepasa todos los límites imaginables. De verdad, queridos publicistas, a partir de la millonésima vez que oigo exactamente las mismas palabras diciéndome EXACTAMENTE lo mismo en el mismo orden, de lo último que tengo ganas es de comprar el producto que anunciáis. ¿De matar a los pobres actores del spot que no tienen culpa de nada? Quizás. ¿De quemar todos los servidores de internet hasta los cimientos? Puede. Pero de comprar lo que sea que anunciáis os puedo asegurar que no. 

Es más, os GARANTIZO que si alguna vez me arreglo los dientes, JAMÁS (pero jamás de los jamases) será con la ortodoncia invisible de no sé que clínica de Valencia con la que me freís el cerebro una y otra y otra y otra vez y que NI SIQUIERA me pilla cerca de casa. Que si quiero aumentar mis ingresos, NUNCA será con no sé que movida para la que sólo necesito un móvil y una conexión a internet y que me vais a explicar con todo detalle en un evento gratuito. Y que si me apetece ponerme al día con los avances que Chat GPT ha hecho en el paquete Office, EN LA VIDA me apuntaré al curso con el que me habéis dado la chapa un trillón de veces en 10 minutos. Daba igual saltar el anuncio, que escucharos una vez hasta el final a ver si os quedabais tranquilos, que tratar de huir por cualquier medio posible porque allí estaba Chavi y sus alumnos martirizándome con lo maravillosa que es su formación y el desastre que será mi futuro si no la hago. 

Así que desde aquí lanzo un llamamiento desesperado: por favor Chavi, por lo que más quieras, por tus hijos, por tu perro, te lo suplico: ¡¡DÉJAME EN PAZ!

lunes, 2 de octubre de 2023

¿Qué yo eres hoy?

¿Quién eres?

¿Cuándo? ¿hoy?

¿Hoy o hace diez años, antes de que se me rompiera el corazón en dos?

¿Cómo? ¿Descansada o muerta de sueño, repanchingada en una tumbona de la playa sin un agobio ni medio o más estresada que un camaleón en Desigual?

¿En qué momento del ciclo menstrual, en el que quiero matar a media humanidad, en el que necesito comerme todas las reservas de chocolate del planeta o en el que sólo tengo ganas de vomitar?

¿Con quién? ¿Con ese que me hace temblar las rodillas, con ese que me saca de quicio, con ese que admiro, con ese que me impone, con ese que me enternece?

¿A qué temperatura? ¿Me derrito de calor, hace niebla y sólo tengo ganas de llorar, el solecito me carga las baterías?


¿Quien eres? 

¿Cuándo? ¿Ahora?

¿Ahora o hace diez minutos? ¿Ahora o antes de ver ese documental, mantener esa conversación, presenciar esa escena en la calle? ¿Ahora o antes de pensar dos veces eso que me acabas de preguntar?

En este vídeo Ter lo explica muy bien (minuto 5).

Como dice Walt todos somos inmensos, contenemos multitudes, dentro de nosotros albergamos un impulso y su contrario y depende de muchos factores que uno de ellos gane a otro y sea el elegido para ser canalizado hacia el exterior en un momento concreto. Y es que 10 minutos antes o después el resultado podría haber sido bien distinto. O dicho de otra forma:



Pues eso.

viernes, 29 de septiembre de 2023

Veroño maldito

Veroño, palabra de moda.

Un otoño disfrazado de primavera. Manteniéndonos alerta, disparando a dar: 14 grados, 25, 32. Abrigo de plumas por la mañana, tirantes al mediodía.

Viene camuflado con calidez, pero al corazón no lo engaña. Lo huele. Intuye sus hojas amarillentas, sus noches tempranas, sus días cortos. Sus braseros, sus rachas de viento, sus castañas asadas. Adivina la retirada del verano y el avance implacable de los fríos invernales.

Y el corazón empieza a encogerse sobre sí mismo, a levantar sus muros protectores y a airear para renovar el ambiente. Por la ventana salen los restos desgastados de libertad y despreocupación estivales y entran cargamentos enteros de la melancolía que trae consigo la gelidez.

Así que, como dice Rafael en bonito, perdonadme que hoy sienta pena y la diga. No me culpéis a mi, sino al otoño.


"Nos dicen: Sed alegres.

Que no escuchen los hombres rodar en vuestros cantos

ni el más leve ruido de una lágrima.

Está bien. Yo quisiera, diariamente lo quiero,

mas hay horas, hay días, hasta meses y años

en que se carga el alma de una justa tristeza

y por tantos motivos que luchan silenciosos

rompe a llorar, abiertas las llaves de los ríos.


Miro el otoño, escucho sus aguas melancólicas

de dobladas umbrías que pronto van a irse.

Me miro a mí, me escucho esta mañana

y perdido ese miedo

que me atenaza a veces hasta dejarme mudo,

me repito: Confiesa

grita valientemente que quisieras morirte.


Di también: Tienes frío.

Di también: Estás solo, aunque otros te acompañen.

¿Qué sería de ti si al cabo no volvieras?

Tus amigos, tu niña, tu mujer, todos esos

que parecen quererte de verdad, ¿qué dirían?


Sonreíd. Sed alegres. Cantad la vida nueva.

Pero yo sin vivirla, ¡cuántas veces la canto!

¡Cuántas veces animo ciegamente a los tristes,

diciéndoles: Sed fuertes, porque vuestra es el alba!


Perdonadme que hoy sienta pena y la diga.

No me culpéis. Ha sido

la vuelta del otoño".

lunes, 25 de septiembre de 2023

La crack del gazapo

Creo que son los americanos los que recomiendan poner en tu curriculum los fracasos, los proyectos que has intentado levantar y no han salido adelante, porque eso da idea al que lo lee que tienes experiencia e iniciativa. Creo que también es un consejo empresarial heredado de los yankies eso de "fracasa rápido, fracasa barato". Bueno, pues yo un poco lo mismo, pero en general.

Quiero decir... que a partir de una número suficiente de cagadas en la vida, se te puede considerar una experta en el desacierto, una especialista en el gazapo. De otra cosa no, pero de equivocaciones, de reveses y de descalabros, sabes. Aunque sólo sea por la práctica. A la fuerza ahorcan.

Nadie podrá decirme que hablo sin saber. Yo, como Scott, hablo con la autoridad del fracaso.





viernes, 22 de septiembre de 2023

Pierde bien

No sé por qué me encontré el otro día con este anuncio de hace años. 

 

 

No es que sea mi marca favorita, pero la idea que hay detrás me gusta. "Estate a lo que estamos" como filosofía de vida. Y entre todas las cosas que dice el narrador, sobre todo esta:

"Cuando pierdas, SOBRE TODO CUANDO PIERDAS, pierde".

Totalmente de acuerdo. Ya que tienes que tragarte un sapo, céntrate en ello. No pierdas tiempo y energías en cosas que no tocan: lamentándote, enfadándote, pensando en bucle que lo que sea que pasó nunca debió ocurrirte a ti, que no te lo mereces. Analízalo por si hay alguna enseñanza oculta en ese putadón y pasa página.

Cuando pierdas... PIERDE.


viernes, 15 de septiembre de 2023

El enemigo en casa


 

Menos mal que ahora se lleva eso de la inteligencias diversas. Porque en lo relacionado con el sentido del humor a lo mejor sumo algún que otro punto de lista, pero desde luego en lo que se refiere a la incertidumbre soy tonta de remate. Soporto mal la falta de certezas. Muy mal. Me agobio. Me entran los nervios. Me pongo en lo peor.

Y buscando explicaciones al caos supremo que ha sido y es mi vida, el otro día me encontré con esto.

"A veces se produce la paradoja del autosabotaje como forma de control. Si boicoteo mi vida puedo diseñar mi propia muerte en lugar de dejar que suceda. Tal vez no sea de mi agrado, pero lo habré escogido".

Y como lo del sabotaje es un hit ya en mi día a día, me ha dado por atar cabos y pensar que no puede ser casualidad. Que aquí hay un patrón.Y que necesitaba más información sobre el tema.

 Así que aquí estoy, leyendo a Hazel Gale. Voy por la mitad, pero por ahora puedo decir que cuenta cosas interesantes y las cuenta bien. Entretenida. Clara. Pedagógica. Y que si la leéis, prepararos para ver vuestra infancia con otros ojos. Yo estoy flipando, vaya.

domingo, 10 de septiembre de 2023

Here we go again

Bueno, chavalotes, pues aquí estamos otra vez. Estoy a punto, a punnnnnto, de volver a liarla. Con lo que sufrí. No me lo puedo creer.

Vosotros no os acordaréis porque han pasado ya cien eternidades y una pandemia, pero hace unos años me metí en una supermovida que casi acaba conmigo. Me costó sangre, sudor y lágrimas terminar una tortura que me tuvo colapsada y sufriendo al máximo la tira y cuando aprobé juré y perjuré que jamás volvería a hacerlo, que como gracia ya había valido, que ya había tenido suficientes chanchullos para llenar veinte vidas y que nunca mais.

Vale pues...




A verrrr... no está decidido aún, pero me lo estoy planteando y eso ya es mucho. Estoy sopesando empezar de cero OOOOOTRA VEZ. DE NUEVO, estoy considerando la idea de cambiar el tren de vías para enfilar un destino diferente que me saque de esta parálisis. Increíble documento.

Es cierto que el chungo me dio fuerzas para salir por fin de una vía muerta y que desde entonces he estado en una estación fantasma, fuera de las líneas regulares, fuera del tiempo y el espacio. Me quedé allí apartada del mundanal ruido para hacer reparaciones y recargar combustible, sabiendo que algún día se acabaría la tregua, que en algún momento tendría que volver a circular. 

Me ha costado: mis vagones estaban muy dañados y mi GPS había perdido el rumbo. No sabía a donde ir ni qué camino tomar. Esperaba al rayo de la inspiración para ponerme en marcha y (parece) que ya ha llegado. Por fin.

¿Problema? Que me esperaba un rayo de poca potencia, manejable y ha caído una descarga de años de sufrimiento. MUCHOS AÑOS Y MUCHO SUFRIMIENTO. Y yo ya no soy un chiqui tren, llevo kilómetro y kilómetros a mis espaldas. No sé si mi locomotora va a poder a estas alturas con semejante recorrido. Y lo que es inaceptable es quedarme de nuevo tirada en una vía muerta (otra distinta) en medio de la nada.

La columna de los pros y de los contras está bastante igualada. Seguiremos informando.

domingo, 3 de septiembre de 2023

Picasso desquebrajado

Hablar del tiempo solía ser una solución de compromiso para situaciones incómodas, un tema neutro, sin polémicas, pero también soso, repetitivo y sin pizca de emoción.

HASTA AHORA

Este ¿verano? (lo llamo así por entendernos, porque los cierto es que no sé si se merecería ese nombre) nos ha tenido en guardia a todas horas, sin darnos ocasión de aburrirnos y mucho menos de relajarnos. Cuando creíamos que ya le habíamos cogido el truquillo a a cosa y que podíamos más o menos predecir lo que nos esperaría al día siguiente... ¡ZAS! cambio drástico. Lunes: 5 millones de grados, 8000 personas ingresadas por golpes de calor, huevos friéndose sobre el asfalto. Jueves: -7 grados, saca el nórdico y el abrigo de la nieve. Domingo: cae tal tormentón que las carreteras se convierten en ríos, literalmente. Todo tranquilidad y cero estrés, como se puede comprobar.

En medio de esta movida yo me he puesto morena sin planificación, sin orden ni concierto, lo que se traduce, como os podéis imaginar, en el caos supremo. Típica excursión a 58 grados en la que crees haberte aplicado protector solar, aunque quizá no y no lo recuerdas porque el calor que has acumulado en tu cuerpo apenas te deja acordarte de tu propio nombre. En esas circunstancias tu espalda puede acabar a topos blancos y negros si la camiseta que llevas tiene agujeros por detrás. Que no es que me haya pasado a mi ni nada, ¿eh? ¡Qué va!

Y en el caso de que me hubiera ocurrido (que no ha sido así, PARA NADA) habría podido pensar que mi bronceado iba a igualarse en la siguiente sesión de piscina. Lo que seguramente no habría supuesto es que dicha sesión sería después de 3 danas, 8 huracanes y 20 tifones y que hasta entonces habría lucido un tatuaje de contrastes de tonos blancos y negros en la espalda que poco le iba a envidiar a las composiciones cubistas picassianas.

Y por si fuera poca desgracia llevar un Picasso regulinchi en la retaguardia, ahora el verano ha decidido hacer dejación de funciones con antelación y traer consigo por adelantado una de las peores cosas del final del estío: la roñilla posvacacional.

Sí, amiguis, ya estoy empezando a dejar por todas partes rastros de mi ADN en cantidades suficientes para poner en serio riesgo el trabajo.de cualquier delincuente profesional que se precie. Lo que se traduce en un sospechoso e incómodo reguero de mugre que voy dejando allá donde voy y una cada vez más distorsionada creación vanguardista, posmoderna y bicolor en mis cuartos traseros. O dicho en palabras llanas: el horror total, vaya.

Yo contaba con quince días más para arreglar el cuadro (nunca mejor dicho) de mi bronceado desigual y mantener a raya el desquebrajamiento de la obra. Sin embargo parece que este verano perezoso ha decidido declararse en huelga de brazos caídos antes de lo previsto y descuadrarnos los planes a todos.

¡Qué paciencia hay que tener, de verdad!

lunes, 21 de agosto de 2023

Posesión fantasmagórica

Saludos cordiales No sé ni por donde empezar. ¿Me presento? Porque igual ya no os acordáis de mi. Bueno, mejor sí, no vaya a ser. 

(Sonido de carraspeo)

Hola, soy SpeedyGirl, la que hace el corte de mangas en la foto de perfil de ahí al lado. Os diría que he estado desaparecida por movidas superheroicas, pero lo cierto es que no, ha sido más bien como un apagón. Fue como si me saltaran los plomos, se quedara mi cerebro a oscuras, se cerrara la puerta de golpe con las llaves por dentro y yo me quedara tirada en el rellano en pijama y con zapatillas de felpa. Que piensas, ¿dónde voy yo ahora con esta pinta a pedir ayuda?

Y ahí he estado un mes, sola, fuera, en el pasillo, sin móvil, sin nada que leer, o lo que es lo mismo, con DEMASIADO tiempo para pensar. ¿Sabéis cuando repites en voz alta tantas veces una palabra que termina perdiendo el significado? Pues un poco eso. Ya no sabía qué era verdad y qué eran imaginaciones mías, qué era real y con qué me estaba troleando mi mente. El horror.

Por suerte, irrumpieron en escena las vacaciones. Se me hundieron unos planes, me salieron otros y sobre todo me vi arrastrada por una posesión fantasmagórica. En concreto la de SpeedyMum, a la que poseyó el espíritu de los gemelos del programa de reformas de Divinity,



¿Que por qué eso me ha afectado a mi? Muy sencillo: porque se le han ocurrido miles de ideas de mejoras habitacionales en las que ella era el cerebro de la operación y yo el músculo. Y daba igual que no tuviera la formación, la habilidad ni los conocimientos necesarios para ejecutarlo.

Con mayor o menor fortuna, estas vacaciones he pintado verjas, he podado árboles, he transportado sacos de tierra, me he sacado el carnet B2 de cortacesped. Y quiero pensar que me he convertido en una versión más joven y menos glamurosa de la prota de Mamma Mia.


(Y cantando peor que Meryl, claro)

El caso es que tanto ajetreo me quitó bastante la tontería. Vine a contároslo aquí como a mitad de vacaciones, pero todavía debía de quedar algún fusible fundido, me creí que había dejado algo programado y resulta que no.  Ejem, ejem, soy una mente brillante, ¿eh?

Total, que esto nos trae a este momento, los instantes previos a mi vuelta al curro en los que, como os podéis imaginar, tengo serias tentaciones de cortarme las venas porque ¡¡NO QUIEROOOOO VOLVERRRR!!

Pero esa ya es otra historia y deberá ser contada en otra ocasión. Ahora sólo quiero saludar. confirmar que estoy viva, desear que disfrutéis de las vacaciones a alos que cabrones que aún os queden días libres y decir que, como siempre:

Por la sombra, bombones.

martes, 11 de julio de 2023

Blancazo (again)

Hace mogollón que no escribo (ni aquí ni en ningún sitio). Y lo que es aún más preocupante, ni siquiera leo. Y ¡ojo!, que venía de una racha lectora muy buena de hasta ocho libros por mes. Pero llevo 60 días en blanco, con la mente paralizada, en encefalograma plano.

Le echaría la culpa a la leche que me di en la mano que me ha tenido cuatro semanas casi manca y pudiendo usar el ordenador poco, mal y a paso de tortuga, pero lo cierto es que esta paralización empezó mucho antes. Y tampoco es un bajón anímico, porque no es una mala época, estoy tranquila, normal. Incluso me está pasando alguna cosa buena. No tengo ni repajolera idea de lo que ha ocurrido para que, de repente, la parte artística-creativa (como queráis llamarlo) de mi cerebro se haya puesto en huelga, sin previo aviso. Pum, apagón, como si se le hubiera acabado la batería. No hay quien saque nada en limpio de ahí.

No se me ocurre nada. Lo poco que se me ocurre me da pereza escribirlo y cuando logro hacerlo me parece un zurullo como un piano. Cojo un libro y leo el mismo párrafo una y otra vez, en la página 50 aún no me acuerdo de como se llama el protagonista y me sorprende oír hablar del funeral de personajes que no sabía que se habían muerto.

Ni leer. ¡NI LEER, COLEGAS! ¿Qué leches me pasa?

sábado, 1 de julio de 2023

Falsa alarma

Lo que son las cosas, oye. Mira que el reverso tenebroso es fuerte en mi y mira que de normal, para mi desgracia, soy de las que se fijan en un donut y solo ven el agujero. Pero esta vez, por lo que sea, conservé la fe, esperé contra toda esperanza. Y por una vez me salí con la mía. 

¡¡ESCAYOLA FUERA!! ¡AR! ¡ROMPAN FILAS!

Así es, amiguis, falsa alarma. El médico que me la puso ("no se ve nada en la radiografía pero te vas enyesada, porque el escafoides siempre se rompe"), mis fisios ("no te hagas ilusiones, algo llevarás, una fisura mínimo"), SpeedyDad alias la alegría de la huerta ("mentalízate para dos meses inmovilizada"), TODOS se empeñaban en hundirme la moral. Pero yo no desesperaba, confiaba en la radiografía de esta semana, en la repetición a cámara lenta, en la fotofinish. El partido no se acaba hasta el pitido final. Y este miércoles...

"En la radiografía no se ve nada, pierdes la escayola, pero te llevas una venda superapretada, el juego del programa y este maravilloso aplauso del público".

Así que ahora aparte de un subidón espectacular y una alegría tremenda, tengo un brazo dolorido de color morado -verdoso -negro que aún no puedo usar porque veo las estrellas, pero con todos sus huesos enteros. Que no es poco. A partir de aquí cuidado y paciencia hasta que la contusión se cure y después libreeee, como el sol cuando amanece y Nino Bravo yo soy libreeee, como el mar. Esto merece pinchar el temazo veraniego más mítico de los 90.





Pd:25 minutos he tardado en teclear esta mierdilla sólo con la mano izquierda.  Aún queda sufrimiento por delante

jueves, 22 de junio de 2023

Tu clave es escafoides

Como dirían en Mision Imposible "tu clave es Jonas" y este mensaje se autodestruirá en 20 segundos. Bueno, pues la versión speedica es la siguiente. Como me imagino que ya supondréis, el surf con bastón TAMBIÉN se me dio regulinchi, me caí mucho (aunque me reí más) y al intento un millón de partirme la crisma hubo premio. Me resbalé, apoyé mal la mano y cantaron fractura de escafoides en la derecha. Como soy diestra, esto quiere decir que estoy escribiendo esta entrada con la izda y que voy a tardar cien eternidades. De hecho, podemos hacer porras de cuanto me va a costar y doy el veredicto en los comentarios.

Total, que muy requetebien, me he agenciado una bonita escayola, el complemento ideal para el verano y los calores que vienen ahora. Y una cosa os voy a decir, no os llaméis a engaño: los días cunden la mitad cuando tienes que hacer todo con una sola mano, que para colmo es la mala. Cualquier cosa es un mundo. Hay que abrir una botella de agua, llama a los bomberos. Quieres colocar los platos en el armario, help 112. Toca cerrarse el botón de los vaqueros, que vengan los GEO.

Seguiría dando la turra con el tema, pero ya os hacéis una idea y en este tercer párrafo el agotamiento se me come por los pies, así que no dilapidemos recursos necesarios para funciones vitales. El resumen es que me esperan unos días regulinchi y que si ya pasaba poco antes por aquí, ahora menos. Pero me entendéis, ¿no?

Ya sabéis que no me olvido de vosotros. Que se os quiere. Y que como siempre...

POR LA SOMBRA, BOMBONES.

viernes, 16 de junio de 2023

Surcando las olas con bastón

Estos días tengo puente y había decidido ir a cabalgar las olas, a ver si esta vez tenía más éxito. Después los agoreros de la agencia estatal de metereología y sus predicciones pinchaglobos me animaron a cambiar de destino a otro en el que no estuviera previsto el diluvio ni que, como temían los galos, el cielo se cayera sobre nuestras cabezas.

Así que le he añadido sol a la ecuación, le he restado olas revolcadoras y le he sumado un remo. A ver si así tengo un poquiiiito más de éxito que en ocasiones anteriores. Lo dudo mucho (y vosotros también lo dudáis, reconocedlo), pero la esperanza es lo último que se pierde.

 


 

Ya os contaré. 

Y con este cliffhanger y un bizcocho, hasta la semana que viene a las ocho (o quizá a otra hora, pero había que rimar)

Ahora más que nunca, que parece que ya llega el veranito hardcore: por la sombra, bombones.

domingo, 4 de junio de 2023

El dilema de las puertas

 


Parálisis por análisis. Quedarse enganchado en el bucle infinito de la dudas. O dicho en bonito, no hay mayor preso como el que duda entre dos puertas abiertas.

¿A que sí?

miércoles, 31 de mayo de 2023

Audaces

 

¡Qué os parece, colegas! En cinco minutos otra vez elecciones. Oooootra vez.¿Cómo os quedáis? Yo, hijos míos, estoy de la fiesta de la democracia hasta el mismísimo unicornio. De verdad os lo digo. Estar en campaña electoral continua non-stop es una tortura. En finnnn....

Cuestión: el plot twist del presi. En lo político nada que decir, no es el momento ni el lugar. Lo traigo aquí por un calificativo que muchísima gente usó para describir la decisión: AUDAZ. Vi incluso un meme de Sanchez que ahora no encuentro, pero que venía a decir un poco esto de abajo.


Y sin nada que ver con este tema concreto, me dio por pensar en la audacia. Yo, que soy una culocagao de manual, eso me pilla muy lejos. Así que consulté a los listillos de la  RAE. Y sobre los audaces dicen los siguiente.

 
1. adj. Osado, atrevido.

Sin embargo, a la osadía le bajan un grado de intensidad porque la definen tal que así:

1. f. Atrevimiento, resolución.

¿Es lo mismo ser resuelto que ser atrevido? No, ¿no? El atrevimiento es un puntito más. Y si ya te pasas de vueltas te tildan de temerario, que es esto:


1. adj. Dicho de una persona: Excesivamente imprudente arrostrando peligros.

A ver, a ver, señores académicos, ¿"excesivamente" según quién? ¿Como se decide que es demasiado? ¿Demasiado para mi abuela, para un fan del puenting o para nuestro (al menos hasta julio) presi?

En cualquier caso, todos, incluso una culocagao como yo, estaremos de acuerdo en lo de la foto de arriba, que sin riesgo no hay historia y que quien no arriesga no gana. Ya lo decía Horacio: 

Mezcla tu prudencia con un grano de locura.

Si, ¿no?


jueves, 25 de mayo de 2023

Piropear bien


 

Venga, vamos a hablar de esto, que me apetece debatir. Estamos de acuerdo en que todos los cuerpos son bellos y bla bla bla. Y que para gustos los colores, por supuestísimo. Y yo además estoy convencida de que, si se mira con atención, todos tenemos algún rasgo bonito a destacar: unos ojos grandes, pestañas larguísimas, cejas perfectas sin necesidad de definirlas, piel suave, pómulos marcados, pecas graciosas... Si buscas, encuentras, desde luego. Pero siendo sinceros, también hay que reconocer que no todos somos Miss ni Mister Universo.Que no todos encajamos de primeras y de forma general con un físico normativo considerado de forma mayoritaria como atractivo.

Bien, pues partamos de eso, de esa enooooorme cantidad de personas (la mayoría, en mi opinión) que está bien, que no tiene ningún problema con su aspecto ni ningún complejo, pero cuyo físico no es su punto más fuerte (Y LO SABEN). Cero dramas, cero traumas, pero son conscientes de que destacan más por su perspicacia, por su agilidad mental, por su capacidad de observación, por su eficacia, por su ternura que por su cara o su tipazo. A toda esa gente, ¿les halaga que les llamen guapas/os? No sé yo...

A ver si me explico. Claro que les gusta, sobre todo si el/la que se lo dice tiene buena intención, si pretende ser amable, demostrar cariño. Entonces se agradece, sin duda. Pero una cosa es agradecerlo y otra creértelo. ¿Y un halago sirve de algo si no te lo crees?

No sé si está quedando claro mi argumento. Imaginaos la típica foto que os ha pillado en un mal gesto y en la que salís fatal. Una de esas que no tienen salvación de ningún tipo. Una catástrofe de foto, vaya. Y alguien que os quiere os dice que en esa imagen estáis muy guapos. Le agradecéis la intención, el detalle, que trate de ser amable, pero no os hace sentir mejor porque no es verdad y lo sabéis. Como piropo no sirve, porque (definición de la RAE) no os da satisfacción. Aunque bueno, también dicen los listillos de la academia que el halago es una muestra de afecto. En ese sentido puede ser, es cierto.

Pero la cuestión es: ¿no sería más eficaz, más útil, no sentaría mejor destacar algo bueno que sea cierto? ¿Algo con lo que la otra/el otro se pueda sentir empoderada/o (palabra de moda) porque le están reconociendo uno de sus puntos fuertes reales?

No sé, pregunto.

lunes, 22 de mayo de 2023

Amores, pandemias y escaleras

Leí el otro día El amor y otras pandemias. Me gustó bastante, la verdad. Es una historia romanticona fresca, sin mayores aspiraciones, pero bastante tierna y divertida. Me sorprendió lo pronto que olvidamos y lo fácil que me resultó reírme del CoronaSuplicio (que, obviamente, no se aborda en absoluto, sólo sirve de telón de fondo con cero dramatismos). Y me encantó el sentido de humor de la autora, que no se da ínfulas de nada y resulta muy graciosa. Además que explica cosas difíciles de forma simple con unas metáforas de "andar por casa" que a mi me llegaron un montón (y ya voy teniendo mis añitos, es decir, que no están pensadas sólo para lectores juveniles). ¿Lo recomiendo? Sí. No le van a dar el Nobel, pero se lee en un suspiro, pasaréis un rato entretenido y os va a dejar buen sabor de boca. La lectura también en eso, ser feliz un rato sin más complicaciones.

Aquí os dejo la metáfora del amor como una escalera, que me pareció bastante acertada y otras citas que me molan.


¡BUENA SEMANA Y POR LA SOMBRA, BOMBONES!


"El amor es como una escalera, cada persona tiene la suya propia. A veces son pequeñas, como taburetes y otras interminables. No te enamoras de golpe, vas subiendo peldaño a peldaño. Con algunos llegas a la cima pronto, no puedes avanzar más, Con otras puedes subir cada vez más arriba. (...) Lo malo de subir escalones emocionales es el daño que te hace cuando el dueño te empuja hacia el suelo. Pero vuelves a trepar, porque tus sentimientos no desaparecen porque te rechacen."


-Se ríe, nos reímos. Y todo es absurdo y fantástico, a pesar de ellos. O precisamente por ello.

-¿Cómo se hace para que alguien te deje de gustar? ¿Para rendirse de una vez? Esperanza, te odio. Un montón.

-No nos parecemos, pero esto no va de eso. Va de compenetración, de rellenar huecos


viernes, 12 de mayo de 2023

Tirar para dentro

La teoría de los cuadros ya os la conté hace tiempo por aquí. La neura esa que me entra a veces cuando pasa algo bueno de creer que el karma es un cabrito. La manía de no querer creerme que las cosas van a salir bien por si al final salen mal. Esa absurda absurdez suprema. A lo mejor os pasa a vosotros también. Ojalá no.

Total, que ahora tengo un ataque de absurditis bastante agudo. Me ha llegado algo bueno y no me atrevo a contarlo por si se gafa. Bueno, no, no es exactamente eso. Me da pereza contarlo porque cuando se vaya al traste voy a tener que dar muchas explicaciones desagradables que podría evitarme si, simplemente, mantengo la discreción un tiempo prudencial.

Y fijaos que el párrafo de arriba tiene sólo cuatro líneas y necesito aclarar unos siete millones de matices:

-- Lo que más me preocupa, que en mi cerebro la construcción verbal única sea esa. "Cuando se vaya al traste" y no "si se va al traste". Mi mente debería contemplar al menos la posibilidad de que salga bien y no darlo todo por perdido. ¿Por qué no lo hace? Por costumbre. Lo que me lleva directamente al punto siguiente.

-- Este tema ya ha salido mal otras veces. No muchas, pero sí un alto porcentaje (la mayoría de un número pequeño, vamos). Que para ser objetivos esto, en realidad, se podría leer de dos maneras: "Va a ser un fiasco como casi siempre hasta ahora" o "lo has intentado poco y en circunstancias distintas, es perfectamente posible que esta sea la buena".  Por razones que desconozco, mi mente elige siempre la primera interpretación.

--Dicho esto, volvamos a lo de "un tiempo prudencial".  ¿Cuánto es eso? ¿A partir de qué momento se considera que algo ya ha durado lo suficiente como para que no te quede otra que comerte con patatas las consecuencias negativas y las explicaciones desagradables? ES MÁS, ¿qué duración es necesaria para evitar la etiqueta de fracaso? Porque eterno no va a ser, claro. Nada, ni bueno ni malo, dura para siempre.¿Donde trazamos la línea? ¿Un día, una semana, un mes, cinco años, una década? 

--Por lo tanto, si no hay consenso en la duración que te obliga ya a hacerlo público, ¿por qué no en cualquier momento? ¿Porque si lo dices hoy el karma se encabrona al verte tan confiado y se acaba mañana? Es decir, ¿aplicamos la teoría de los cuadros? ¿Y si la estamos aplicando al revés? ¿A ver si el karma es un abusón de cole y cuanto más inseguro te ve más se ceba contigo? ¿A ver si lo que hay que hacer es ir por la vida más chulo que un ocho y que nadie, NI SIQUIERA el kama, se atreva a toserte?

¿A ver si llevo toda la vida empujando la puerta de la felicidad y resulta que había que tirar para dentro?

lunes, 8 de mayo de 2023

Ni a tiros

 

Virginia era un poco dramas, pero en esto de arriba tiene razón. ¿Cuántas veces se escribe para dejar salir lo que sea de la manera menos violenta posible? ¿Cuántas veces escribir es desahogarse, en todos los sentidos posibles?

Por eso me extraña tanto que este blog ha sido siempre mi válvula de escape y llevo desde la semana pasada sin poder escribir una letra. No es que no me haya acordado, no es que no me haya dado tiempo, es que nada me parecía bien. Tenía pocas ideas y malas. Aquí, que cabe cualquier chorrada. Aquí, que no tenemos unos estándares mínimos. Apaga y vámonos.

Así que voy a publicar esto por cabezonería pura y a conseguir una pistola, por si todo lo demás falla. ¿Que igual es una pistola de agua? Ni confirmo ni desmiento. Pero tendrá gatillo.

¡Buena semana!

lunes, 1 de mayo de 2023

Prima hermana de Dory

Siempre he sido una persona bastante dispersa, pero de un tiempo a esta parte empiezo a acercarme peligrosamente al nivel de concentración y memoria de Dory, la de Buscando a Nemo. Es que mi mente va por libre, de verdad os lo digo. No ya que tenga varias pestañas del ordenador abiertas y que al cambiar de una a otra se me olvide lo que iba a hacer porque me despisto con algo. Que bueno, eso mal, pero lo puedo aceptar. Pero es que cada vez me es más difícil mantener la concentración en cualquier cosa un tiempo razonable, me cuesta lo que no está escrito leer textos largos de no ficción, me resulta casi imposible no leer en diagonal mucha información en pantalla. 

Y pensaba que si a mi me ocurre esto, que me he pegado media vida sin usar apenas dispositivos electrónicos, que no les pasará a los chiquitillos que han tenido un móvil y una tablet en cada mano desde que nacieron. Que seguro que alguna parte del cerebro se les ha modificado ya y les pone cada vez más difícil concentrarse en contenidos densos y formatos analógicos. Luego que els cuesta engancharse a la lectura. Pues sí, claro, pero es que se lo estamos poniendo difícil, la verdad.

La cosa es que leyendo sobre esto en este artículo, me encontré con esta otra idea en la que no había pensado y que aún me chocó más.

"También impacta reflexionar sobre cómo los niños actuales viven una existencia con una agenda ya preparada y sobreprotectora, sin poder tener todas aquellas experiencias (el juego libre, los retos de la calle, las dinámicas jerárquicas, sacarse de apuros, inventar, explorar y descubrir) que, en un primate, son necesarias para desarrollar una oportuna estructura mental, perceptiva y emocional. Estos niños son como los macacos de los laboratorios, que nacen en una jaula y viven su desarrollo en un ambiente constreñido y artificial, sometidos a tareas y pruebas constantes. Sin su ambiente físico y social, el animal no puede recibir aquellos estímulos que, conforme un programa evolutivo de millones de años, son indispensables para activar y canalizar la formación de su capacidad mental."

Porque, bien pensado, tiene razón, ¿no? Nuestros pequeños saben inglés, informática, música y practican dos millones de deportes en un horario estresante que no les deja tiempo libre para lo que ellos quieran. Y no sólo eso, sino que esa agenda imposiblemente completa les convierte en pardillos que saben mucha teoría, pero muy poco de la práctica real, porque no han tenido tiempo de encontrarse con problemas inesperados y resolverlos. 

Y al final la vida va de eso. De ir apañando cada marrón random que te cae encima para poder pasar a la siguiente pantalla del videojuego de la vida. Si no practicas en las primeras, mal te va a ir en las siguientes. Y al final se nos va a llenar todo de jugadores bilingües y muy formados que se quedan atrapados para siempre en la pantalla 1.

jueves, 27 de abril de 2023

Distorsionando

Me gusta leer libros divulgativos sobre psicología porque me da tranquilidad ver que a muchos nos pasa lo mismo, que a la mayoría de la peña su coco le hace la vida un poco imposible a ratos. Y me mola comprobar que cada uno lo llamamos de una manera, pero que hay cosas tan frecuentes que hasta tienen clasificaciones y denominaciones técnicas. El tema es que como son tan tan tan técnicas a veces no se entiende un mierdo y aquí vengo yo, a traducirlo a la jerga blogger para tenerlo a mano a modo de chuleta cuando lo necesite.

Total, que como se ha comprobado miles de veces en esta santa casa, a menudo nos entendemos regulero porque aquí cada uno percibe y procesa la realidad como le sale del mismísimo unicornio. A esto los listos lo llaman distorsiones cognitivas y hay la tira. Yo sólo voy a poner las que en mi caso son grandes hits:

-Filtraje o mirar el donut y sólo ver el agujero (dicho en cristiano).
 
-Pensamiento dicotómico o estar seguro que el mundo se acaba si no sale todo perfecto. Sin medias tintas, sin grises, sin empates.

-Inferencia arbitraria, que suena megacientífico, pero que no es sino eso de creer que les adivinas el pensamiento a los otros, cuando, en realidad, no tienes ni repajolera idea de lo que les pasa por la cabeza. O sea que si les oyes reírse justo cuando te cruzas con ellos no tiene por qué tener nada que ver contigo.

-Magnificación de detalles irrelevantes. Ya decían los de Gran hermano, que en la casa "todo se magnifica" y puede que algunos lo hagamos 24/7 fuera de la casa también. Es decir, que el planeta no dejó de girar ese día ese te tropezaste al salir de clase y se te cayeron todos los papeles al suelo. Nadie lo recuerda más que tú, de hecho.
 
-Etiquetas globales. No, no TOOOODA la gente te trata mal porque el notas de turno te haya tomado por el pito del sereno. Te lo ha hecho él, a los demás no los metas en el mismo saco.
 
-Descalificación de lo positivo. Vale, tu abuela te dice que podrías presentarte a Miss Universo porque te quiere, pero no siempre que te echan flores los demás es de mentira. Igual hay días que, efectivamente, tienes el guapo subido y no pasa nada si te lo crees. Y quien dice guapo, dice todo lo demás, ya tu sabhe.

Hay muchos más, estos son los que a mi me complican más la vida. ¿Y a vosotros?

lunes, 24 de abril de 2023

El vaso medio lleno o medio vacío

 


Esto iba ayer, claro. Pero bueno, ayer tuve lío y es un texto muy aplicable también a los lunes, ¿no? No sé de quién es, lo vi en Twitter.
¡Venga, colegas, a por la semana!

viernes, 21 de abril de 2023

No, siguiente pregunta


 

Ahora mismo no estoy en el caso de la foto porque llama a mi puerta ya mismo un fin de semana llenerrimo de planes guays. Que descansar tampoco voy a descansar un mierdo y lo necesito como el comer, pero en fin, ese es otro tema. La cosa es que he visto esta genialidad en twitter y la he traído aquí para guardarla porque es la respuesta perfecta para un montón de días chof.

By the way, sé que los que paráis por aquí sois entre nada y nada de nada tuiteros, pero igualmente esto hay que comentarlo. ¿Qué opinamos de la movida de Twitter Blue, los verificados y toda esa mandanga? ¿Quién iba a decir que la marquita que antes servía de prueba de fiabilidad ahora se interprete como símbolo de que sólo pagas porque tienes pensado timar o engañar a los demás usuarios?

Las vueltas que da la vida, con Elon no ganamos para sorpresas...

domingo, 16 de abril de 2023

Por suerte, nunca seré famosa

He vuelto a hacer otra vez eso que no se le debe hacer nunca a un escritor: leer su primera obra y la más reciente la misma semana. Lo siento, no lo he podido evitar, han llegado a mi, será el destino. Y me ha pasado un poco lo mismo que os conté con Colleen, pero elevado a la enésima potencia. Tanto, tanto, tanto, que he pensado: "Por favor, si alguna vez soy famosa, espero no hacer esto".

Me explico.

La autora a la que me refiero es bastante conocida en España y está siempre en buenos puestos de ventas. Como escribe relativamente rápido, sale a libro por año, así que no creo que sea multimillonaria en plan JK Rowling, pero problemas de dinero tampoco debe de tener. Pienso yo, vamos, es muy leída y muy regalada. Así las cosas, se podría haber evitado reeditar su primera novela que francamente es... pues bastante castaña, la verdad. Sin ánimo de ofender, lo digo como un hecho objetivo.

Y repito lo que digo con Colleen, que es completamente comprensible, que todos aprendemos con los años, que ella es la escritora que es ahora gracias a todos los títulos anteriores. Y que nunca hay que avergonzarse de los primeros trabajos porque sin ellos no habrías conseguido avanzar. Pero una cosa es eso y otra no tener un mínimo de objetividad para detectar cuando un primer texto es bastante horror. Si lo escribiste a los 13 años y no sabías nada de la vida y de las relaciones, tus personajes serán planos, tus escenas inverosímiles y tus conflictos superficiales y mal resueltos. Es normal, eras pequeña, te quedaba todo por aprender, pero lógicamente te saldrá una historia bastante regulinchi. Que tú le tengas cariño porque fue tu primera vez, perfecto. Que no te de corte, maravilloso. Que la reedites como si estuviera al nivel de lo que escribes en la actualidad es pasarse un poco de rosca. Porque las comparaciones son odiosas y porque, por mucha ternura que te den tus comienzos, objetivamente, no tiene bastante calidad.

Me pregunto siquiera si será consciente. Porque leyendo las reseñas de sus fans, les ha parecido estupendísima esa obra. Fresca, divertida, adictiva. Y sí, eso lo puedo admitir sin problema. Pero también tiene un argumento que raya el absurdo, problemas duros y difíciles se abordan de forma frívola, falta coherencia, consistencia y los personajes parecen de cartón piedra. El ritmo es atroz, muy mal llevado. No hay quien se crea nada porque algo que en la página 4 es blanco en la primera línea de la 5 es negro y me parece imposible empatizar con nadie de los que pululan por la historia dado que sus decisiones y sentimientos son incomprensibles. Para un adulto, al menos. A lo mejor para alguien de 13 años, quizá los que tenía la autora cuando lo escribió, puede ser... 

El caso es que sus fans le dicen que es una novela estupendísima y ella se lo cree y la republica. Y yo me pregunto: ¿no tiene una amiga, una madre, una editora, un alma caritativa que sea sincera? ¿Alguien que le diga: "cariño, este fue un estupendísimo primer trabajo y en su momento perfecto, pero ahora ya no está a la altura. Guárdalo en un cajón y léelo sólo en la intimidad"?

Es una suerte que yo nunca vaya a ser famosa. Odiaría que me pasara algo así.

jueves, 13 de abril de 2023

ChiquiPlanetas

Perdón, he tardado en volver por aquí porque aprovechando la Semana Santa y tal he estado de viajecito interplanetario. Y bueno, bien, nos ha hecho buen tiempo, hasta he cogido un poco de colorcillo. Ah, eso sí, tengo que deciros que esto de que no haya atmósfera en casi ningún sitio y las temperaturas entre el día y la noche varíen tanto es un tostón. 200 grados de diferencia en el termómetro es un verdadero reto a la hora de hacer la maleta.

Pero en fin, que tampoco quiero aburriros con la crónica completa de mi salida espacial. Yo venía a hacer una denuncia, porque aquí todos tenemos la piel muy fina y que si me ofende esto, o respeta lo de más allá... y al pobre Plutón lo están bulleando como si fuera el marginado de la clase y nadie dice ni pío. Y yo me indigno, claro.

Primero, después de toda una vida con categoría de planeta, lo degradaron sin previo aviso. Que eso tuvo que llevarlo mal el pobre, no me digáis. Como es un cuerpo celeste resiliente y sereno, sin media queja y buena cara, siguió adelante, todo digno. Pero luego aquí los amigos de la Nasa, seguramente después de una ronda de chupitos por la jubilación de Mike (miembro veterano de la plantilla y capitan del equipo de baseball de su departamento) tuvieron EL IDEÓN. Decidieron que no podía esperar ni un minuto más, y que a la panda de chiquitillos que no fueron capaces de descubrir hasta que tuvieron telescopios tochos había que ponerles un nombre molón, con garra. Y achispados como estaban con los chupitos de licor de mora casero de la tía abuela de Mike, no se les ocurrió nada mejor ni más sonoro que planetas enanos. ENANOS. Ni planetas de volumen reducido, ni cuerpos celestes bajos de torax, ni de talla XXS. ENANOS. De verdad, qué falta de sensibilidad y de todo.

Pero bueno, como se les nota que son miembros del universo de escasa complexión física pero fuerte personalidad, no se achantaron y allí están, rotando sobre sí mismos para mostrar su mejor cara sin que les afecten las críticas ni las descalificaciones. A mi me caen guay y tienen nombres muchos mejores que los grandotes clásicos: Eris, Haumea, Makemake, Ceres. Ni punto de comparación, no me digáis.

El más simpatiquete es Makemake, con síndrome de hermano mediano, siempre moviéndose en escala de grises. Ni grande ni pequeño, ni muy cerca del Sol ni muy lejos. Difuminadamente rojizo, se le ven las ganas de imitar el marrón del gigantón de la pandilla: Plutón.

Haumea es el deportista. Corpulento y rápido, es el que a más velocidad gira. Tanto, que eso le da a su aspecto la forma ovalada de una pelota de rugby. Aún así, tiene que estar estresado, el pobre. Todo su día dura lo que cuatro horas en la Tierra. Qué agobio, ¿no?

Eris es el follonero que la lió parda y por el que empezó toda la movida que acabó con Plutón degradado de categoría. Casi tan grande como él, es una Luna 2.0 por su tamaño muy similar a nuestra Lunita. Eso sí, con un carácter bastante peor y un mal ambiente que lo hace inhóspito como pocos.-243 graditos marcan los termómetros allí. Poca broma.

Ceres es mi favorito. El benjamín del grupo, no tanto por su tamaño, sino porque lo llaman planeta embrionario (que no se terminó de formar, dicen. A saber a qué se refieren). Está muy cerquita del Sol, es el primero de los chiquitillos al que mandamos una sonda espacial y ¡¡tiene agua!! Y si tiene agua, algún extraterrerestre de alguna clase tiene que andar por allí, sólo que nos tienen miedo, se esconden y por eso no los hemos visto aún. Pero ya los encontraremos, ya...

Y en fin, hasta aquí mi TED talk sobre no discriminar a ningún cuerpo celeste por su tamaño. No seais bordes, hombre, no son enanos, son bajos de torax.

lunes, 3 de abril de 2023

10.000

¿Sabes esas veces que lees una frase de casualidad y te deja tocada para el resto del día? A mi me pasó ayer con esta, y aún estoy enganchada en el bucle.


¿Has vivido 10.000 días 

o has vivido el mismo día 10.000 veces?

 

Así que, aunque lo he intentado, poco más os puedo contar. 

Os dejo con vuestros pensamientos.

(Postpost: A los que estáis de vacaciones ya, os odio. Al resto de gente de bien, ¡¡feliz semana!)

miércoles, 29 de marzo de 2023

Menuda panda

 

Al loro con esta panda, que no sé qué me flipa más. 

Primero, la reunión. ¿Cuándo se han juntado todos estos cracks en el mismo espacio tiempo? En ninguna peli salen todos, ¿no? Y no parecen unos premios ni nada así,tiene pinta de decorado. O de finde en casa rural con los amigotes. ¿Os imagináis la conversación?

-¿Quién se encargaba de las patatas? ¿Habéis comprado las de sabor huevo frito que son las mejores?

-No, que estoy a dieta para mi próximo personaje en Misión Imposible. Estos días todo light.

Segundo, la fecha. Dicen que la foto tiene 20 años. ¿Lo qué? ¿Y qué han hecho algunos, congelar el tiempo? Porque los mayores están igual ahora que hace dos décadas. Los medianos parecidos. Y a Brad le da lo mismo, porque va a mejor, el cabrito de él. Menuda lotería genética la de este pavo. Es más, os diré, por si os sorprende tanto como a mi, que él y Tom se llevan sólo un año. ¿Cómo os quedáis?

Tercero, el infiltrado. ¿Qué pinta Edward Norton ahí?¿En esa época se le conocía más? ¿O era el primo segundo del dueño de la casa rural donde pasaban las vacaciones y no quedaba otra que dejarle salir en la foto?

Menuda panda, colegas.

domingo, 26 de marzo de 2023

Plot twist delfinero

Por motivos cero interesantes estos días me estoy viendo en la obligación de resumir mi vida (a grandes rasgos, porque entrando en el detalle nos eternizaríamos ya tu sabhe). Y conforme voy contando cosas no paro de pensar: y esto pa'qué, menudo sufrimiento infinito me costó lo otro y total después no sirvió para nada, como no pude darme cuenta de lo de más allá si estaba claro cristalino. De hecho, el pensamiento general más repetido es: ¿pero en ese momento había alguien a los mandos? Y si lo había, ¿estaba sobrio?

No me sorprende que los demás no entiendan mi vida, porque lo cierto es que vista en conjunto no la termino de entender ni yo. En el momento, en medio del bullullu, con la escasa y sesgada información de la que disponía, puede que mis decisiones tuvieran sentido. O al menos fueran comprensibles, consecuentes. Pero abriendo el plano y mirando los resultados a la vez, sólo se distingue un torbellino de caos que provoca una reacción unánime: el emoticono de la muñequita de whatsapp que encoge los hombros y sube las manos en señal de no saber o no entender nada.

El problema, además, es que en muchos casos no tengo la sensación de haber decidido yo, sino que han decidido por mi: las circunstancias, las coincidencias, la salud. Si escoges la única alternativa que te parece viable, ¿estás eligiendo o estás aceptando? 

Aún así, me gusta pensar que soy como los delfines, que hicieron un plot twist que después no les convencía, recogieron cable en el tiempo de descuento y apechugando con las consecuencias se convirtieron en lo que son ahora: el animal preferido de (casi)toda persona de bien y la estrella de oceanográficos y acuarios.

Si un delfín contara su evolución a lo largo de la historia, puede que también le respondieran con el emoticono de la muñequita que encoge los hombros. En el vídeo de abajo las pruebas.

¡¡BUENA SEMANA!!



  

domingo, 19 de marzo de 2023

Blanca y los padecimientos de la gente guapa

Me acordé escuchando el discurso de Blanca Portillo del otro día, pero vaya, que esto lo he pensado muchas veces. Ella se refería a que los actrices no tendrían que estar supeditadas a su físico, que tendrían que poder dedicarse a ese oficio sin ser una top model. Tiene razón y se podría decir de muchísimos otros ámbitos: no tendrías que necesitar estar buenísima para presentar un telediario, porque no hace ninguna falta. No tendrías que necesitar ser un bellezón para poner copas en un bar de moda. Y así hasta el infinito

Pero más allá del fondo de las palabras de Blanca, quería comentar un punto concreto de lo que dijo. Ella se comparaba (pero al revés) con Brad Pitt, el cual ha tenido que luchar contra los prejuicios de ser sólo una cara bonita para que le dieran papeles interesantes. Y a eso voy, a comentar los "padecimientos" de la gente guapa. Que los tendrán, claro, porque a cada uno nos importa lo nuestro y todos soportamos unos niveles de sufrimiento parecidos, los que lloran en una limusina y los que no tienen donde caerse muertos. Pero mi pregunta es: ¿de verdad de verdad de verdad los macizos/as no se dan cuenta de que compiten en el videojuego de la vida en modo fácil? ¿De verdad de verdad de verdad no son conscientes de que, aunque tengan sus problemas como todo hijo de vecino, su físico les consigue sin esfuerzo muchas cosas que al resto de los mortales les cuestan sangre, sudor y lágrimas?

¿En serio no ven que juegan con ventaja? ¿Vosotros os lo creéis? 

Yo regulinchi.

martes, 14 de marzo de 2023

Evelyn y sus siete maridos

Bueno, pues aquí estoy, viniendo de nuevo a hablar de un libro con mis ya clásicos años de retraso. Porque para qué leer las cosas cuando las lee todo el mundo y poder comentar a su tiempo, ¿eh? Hasta ahí podíamos llegar.

Total, que por fin he leído Los siete maridos de Evelyn Hugo. Y muy bien, me ha gustado. ¿Tanto como a la gente? Pues no sé, pero sí, está chulo. Ágil, adictivo, glamuroso. Escrito guay, algunos recursos narrativos me han molado bastante. El plot twist del final sorprendente, no me lo vi venir y estaba avisada ya de que había un plot twist gordo.Como a mi el mundo de las estrellas de cine me pirra, le doy un 10 en temática y ambientación. Así que en general, estupendo. Creo que me habría impactado más si no hubiera llegado a él con las expectativas tan altas, pero vaya, quejas cero.

Por destacar algo distinto a lo que he visto en las reseñas, me ha gustado mucho la habilidad de la autora para hacer una prota contundente, IMPLACABLE y a la vez rasgada por los matices. La mayor parte del libro parece no sé si mala, pero sí fría, sin escrúpulos o al menos salvajemente egoísta y luego resulta que no es así sólo por ella. Que a veces se hacen cosas moralmente cuestionables por las razones correctas. Para mi, de hecho, esa es la idea central de la novela: nadie es completamente bueno o malo.

De Evelyn me ha llamado la atención su pragmatismo, su seguridad para conseguir lo que quiere, no sólo el qué, sino el cómo. Que vea tan claros los pasos que debe seguir para lograr sus objetivos y que sus planes siempre salgan bien. Sus errores, los que más lamenta, son de juicio, tienen que ver con sus decisiones, no están relacionados con como terminan o la consecuencias de sus acciones.

He apuntado muchas citas. Aquí van algunas:

-No hay víctimas ni vencedores. Todos estamos en algún punto entre esos extremos. La gente que se proyecta como una cosa o la otra no solo se engaña a sí misma, sino que además es dolorosamente poco original. 

-Estar orgullosa de tu belleza es contraproducente. Porque te permites creer que lo único destacable de ti es algo que no dura mucho

-Debes transgredir los límites de la gente y no sentirte mal por ello. Nadie va a darte nada si no lo pides

-Hazte un favor y aprende a tomar la vida por las pelotas, querida. No te esfuerces tanto en hacer lo correcto cuando resulta tan dolorosamente obvio cuál es la decisión inteligente.

-Cuando te dan una oportunidad de cambiar tu vida, debes estar dispuesta a hacer lo que sea con tal de lograrlo. El mundo no te da cosas: tú debes tomarla
 

-El mundo respeta a las personas que se creen capaces de gobernarlo.

-Si quiero que las cosas cambien, tengo que cambiar mi modo de hacer las cosas.


-La culpa es un sentimiento con el que nunca me he llevado bien. Me sucede que, cuando llega, trae consigo un ejército. Cuando me siento culpable por una cosa, empiezo a ver todas las otras cosas por las que debería sentir culpa."

jueves, 9 de marzo de 2023

Castigo kármicos para malas lectoras

A ver, por favor, esto que no salga de aquí que no quiero ir a la cárcel, pero yo soy una lectora horrible. ODIOSA. De las que los escritores detestan con la fuerza de mil soles. Y lo más triste es que llevan toda la razón, no tengo disculpa ninguna. Pero es que no puedo evitarlo. No puedo.

¿Que qué hago? TODO lo que no se debería hacer al leer. Cuando la cosa me interesa mucho, leo a lo loco, lo más deprisa que puedo, casi en diagonal para enterarme cuanto antes de como acaba. Traducción: me pierdo la mitad. Maaaal.

Todavía peor: cuando me interesa tanto tanto tanto y estoy tan metida en la historia que los personajes me importan como si fueran de mi familia, voy al final a asegurarme de que todo acaba bien. A mi, al contrario que la mayoría de la peña, los spoilers no sólo no me fastidian, sino que me dan tranquilidad. Para qué voy a leer sufriendo pudiendo leer tranquila y feliz. Que si lo que le preocupa al autor es que voy a perder el interés y voy a abandonar, que duerma tranquilo, que eso no me pasa. De nuevo, al contrario que la peña, me encanta regresar sobre mis pasos para fijarme como he llegado a mi destino. No sé, me da serenidad entender como funcionan las cosas. Un poco lo mismo que cuando de pequeños abríamos relojes para verles el mecanismo de dentro, pero con palabras.

Y el colmo de los colmos, y esto si que es de denuncia a la Guardia Civil, lo sé. Como haya una relación o algún problema en la trama que por lo que sea me toca más, voy buscando lo relativo a eso para leerlo primero. Y again, que no cunda el pánico, que una vez que me he enterado de la chicha vuelvo a buscar lo demás. Porque nunca es independiente, claro. Las decisiones, las reacciones de los protas están unidas al resto de lo que les ocurre. Y cuando las ves por separado no entiendes un mierdo. Luego, con el contexto, piensas. "Ahhhh, coño". Es la misma sensación que cuando Jessica Fletcher resolvía el caso y ponían imágenes del crimen con detalles en los que antes no habías reparado. Era mi parte favorita del episodio, ¿la vuestra no?

Soy la peor lectora del mundo. Lo tengo claro y lo siento en el alma. Pero no os preocupéis, que el karma es sabio y me ha puesto mi castigo siendo el mismo tipo de escritora. ¿Qué hago ahora con mis propias historias? Liarla parda otra vez. También me pasa que tengo personajes preferidos, que me caen mejor y tramas que me inspiran más.Y entonces sólo quiero escribir de eso. Me cuesta menos esfuerzo, fluyo, así que cuando estoy atascada con lo demás (algo muy, pero que MUY frecuente) me pongo con mis prefes. Y el drama no es sólo que ellos hayan llegado ya al final de la novela y el resto esté en el capítulo tres. El drama no es que esté todo desordenado, sea un lío de la leche y ni yo misma sepa lo que ha ocurrido ya y lo que no en el argumento. EL DRAMA es que hay millones de escenas que mucho me temo que después no servirán. Como ha quedado claro hace un párrafo, las reacciones, los sentimientos de los personajes están condicionados por el resto de su vida. Y conforme voy escribiendo lo demás hay detalles que se van modificando y que hacen imposibles determinadas conversaciones, determinadas emociones.Y me toca borrar y borrar y borrar y borrar y borrar.

Y veo a mis autores favoritos pensando: ¡Toma,castigo del karma! Para que aprendas a leer como es debido. ¡HOMBRE YA!