lunes, 30 de diciembre de 2013

2013, en tweets

A 2013 le queda ná y menos y en estas fechas lo típico es hacer resúmenes de todo tipo del año que se acaba: de noticias, de imágenes, de canciones, de portadas de periódico, de complementos de moda... cualquier cosa vale para repasar los 12 meses que ahora terminan. Bien, pues yo lo voy a hacer con tweets.

El tema es que yo me meto en twitter cuando hay eclipse total de luna y los planetas de alinean en la órbita de Saturno, así que leo en diagonal, un poco a lo loco y favoriteo y retuiteo cuando me acuerdo, que es poco tirando a nada. Por eso ya os podéis imaginar que en esta entrada no van a estar, ni por asomo, los mejores tweets de 2013, sino algunos de los que más gracia me han hecho. Aún así, creo que nos valen para hacernos una idea de como ha sido el año.

Movidito.

2013 ha sido movidito.

Hemos tenido de todo. Y a las pruebas me remito:

-Una crisis nuclear


-Un nuevo Papa. (Otro más, digo)




-Corrupción


-Y más corrupción


-Y más corrupción


-Y aquí no dimitía ni el tato. Porque eso sí, 2013 no ha traído ni una dimisión ni media. Por el precio de los pelotazos, supongo


-El año estaba tan interesante, que no se resistieron a espiarnos. A Mariano, a la Merkel... y a todos, en general


-Y como a la primavera no se le vio el pelo...


-Nos amenazaron con que no habría verano. Pero era mentira


Y aquí estamos otra vez, a puntito de empezar 2014. A ver como nos sale el nuevo.

viernes, 27 de diciembre de 2013

Navidades espídicas

Estas navidades han sido medio-espídicas y doble-espídicas a la vez. Lo de medio es porque no las he pasado en Speedytown ni rodeada de speedicos y porque no he estado con la Speedyfamily al completo. Lo de doble lo digo por la rapidez, dado que lo mío en estas fiestas ha sido llegar, tocar chufa y tener que volverme a currar a Speedytown. Qué le vamos a hacer.

Aún así, por cortas que sean, una navidades en mi casa son puro caos y ha habido tiempo para todo:

-Para ver "Tintin y el secreto del Unicornio" en pantalla grande y pasarte la película explicando qué es un cleptómano, como son los carteristas y qué significa estar sobrio.

-Para poner "sumas difíciles" a petición de un pequeño interesado y que luego ese mismo interesado, futuro genio de las matemáticas, te pregunte: "¿Después del 10 qué número va?"

 -Para asistir a lo que parecía el ensayo general de La Voz en versión mini y que una decidida aspirante, subida a una cama y utilizando un boli a modo de micrófono, te suelte: "Iba a cantarte el último villancico que he aprendido, pero no sé si entiendes inglés". Pues hombre, por mi bien, espero que un poco más que tú, porque si no, mal voy.

-Para encontrar trozos de polvorón debajo del árbol de Navidad entre los regalos que se supone que nadie debería haber tocado todavía y pensar: "Elemental, querido Watson, hay unos pequeños alifanfarrones revolviendo los paquetes navideños".

-Y para hacerte la listilla en una pista de hielo y decirle a dos pequeñas estrellas del patinaje en potencia que es imposible patinar sin pegarse unas cuantas leches, que patinar, como vivir, es caerse y volverse a levantar y que, por eso, lo más importante es aprender a aterrizar cuanto antes. Que cuando notas que estás perdiendo el equilibrio, lo peor que puedes hacer es asustarte, que hay que intentar mantener la calma y adoptar una postura que te ayude a suavizar el guarrazo. Que siempre, SIEMPRE, hay una forma de que la caída duela menos.

Y que si ya estás en el suelo, aquí tienes mi mano para ponerte de pie otra vez.

martes, 24 de diciembre de 2013

¡¡¡FELICES FIESTAS!!!

Por razones que no alcanzo a comprender pero que sospecho que tienen bastante que ver con la maravillosa revolución de hormonas que trae consigo siempre mi mejor amiga LA REGLA, llevo unos días invadida por un espíritu de Mr Scrooge que lo flipas. Quería escribir algo que no contuviera las palabras muerte y destrucción,  pero ya van cuatro borradores en una hora y no veo nada claro en el horizonte, así que no voy a seguir forzando la máquina. Pero bueno, ya que he pasado por aquí, lo que sí voy a hacer es felicitaros las navidades, que una cosa es ser Mr Scrooge reencarnado y otra no tener ni unos mínimos. Así lectores, blogueros y surferos de la Red de redes en general, que paséis unos días estupendos, si tenéis vacaciones que las disfrutéis y no os felicito el año porque espero pasar por aquí con mejor ánimo antes de que acabe 2013. Así que lo dicho...


             ¡¡¡FELICES FIESTAS!! 

miércoles, 18 de diciembre de 2013

Chicos B

Ya sé lo que dije el otro día. Lo de no ser un culocagao y jugársela y echarle un par y todo ese rollo. Y de verdad que no tenéis que echarme la charla porque no hay nada más fácil que convencer al que ya está convencido. El problema es que para ponerme a la tarea me falta un pequeño detalle, nada, una tontada sin importancia: alguien con quien jugármela.  La parte contratante de la primera parte, que dirían los hermanos Marx.

Y es que hace que no hay candidatos en el horizonte desde... puf, ni me acuerdo. Hace la tira que me crucé con el último maromo que habría merecido un mínimo esfuerzo romanticón y tristemente resultó que el chaval tenía los mismos gustos que yo, es decir, que su hombre ideal para vivir una pasión desenfrenada también era George Clooney. Un aplauso para mí y mi intuición femenina, ya lo sé.

Eso fue aproximadamente en el Pleistoceno superior y desde entonces no me ha vuelto a interesar nadie. Hasta hace no mucho esto no me preocupaba demasiado porque, por una simple cuestión de probabilidad, era lo lógico. En mi día a día no me cruzaba con casi ningún chico y los poquísimos XY que había en mi vida eran básicamente familiares míos en primer grado, jefes odiosos que habían hecho la mili con Matusalén o chavalillos a los que yo les doblaba la edad. La única opción para ligar esos días habría sido cambiarme de acera y teniendo en cuenta que me gustan más los chicos que comer con los dedos no era una opción viable. Qué le vamos a hacer.

Total, que el problema en aquel entonces era evidente (falta de material), pero el de ahora no está tan claro. La Supermovida y mi nueva clase de alemán han traído a mi vida mogollón de chicos y aún así la triste realidad es que no me interesa ninguno. Vale que algunos son señores casados, otros están más cerca de la edad de los Speedysobris que de la mía y a unos pocos les falta un hervor, a pesar de haber soplado ya unas cuantas velas en su última tarta de cumpleaños. Pero aún quitándolos a todos ellos queda mogollón de peña para elegir. ¿Y no me interesa nadie? ¿NADIE? Raro, raro, raro... que diría Papuchi.

No sé. Igual se me ha soltado algún cable en el cerebro, o se me ha desajustado la conexión neuronal encargada de los filtros romanticones y se ha quedado en modo avión. Ni idea de lo que pasa, pero lo que está claro es que alguna solución habrá que buscarle a esto, ¿no? Más que nada porque, si no me matan antes los estreses de la Supermovida de una lesión cardiovascular, esta falta de emoción cardiaca va a acabar conmigo a base de aburrimiento. ¿Y puede haber una muerte más triste que esa?

Total, que este es el plan: trabajar en modo "a prueba de fallos", igual que hace Windows cuando algo no termina de funcionar correctamente. El sistema cambia de color, limita ciertas funciones y tira pa'lante como puede hasta que le arreglen lo que está escacharrado. Yo no tengo pensado ningún cambio de color, pero voy a hacer algo parecido: prestar atención a los chicos B. A esos que no son malos niños, pero que a ti (o a mi) ni fu ni fá. Los que no te acuerdas como se apellidan. Los que no sabrías decir hace cuantos días que no les ves. Los que se cortan el pelo y te lo tienen que chivar ellos porque tú no te das ni cuenta. Esos.

Voy a fijarme más en los chicos B no sea que el filtro romanticón escacharrado me esté jugando una mala pasada y se me estén colando maromos A sin enterarme. Ojalá sea eso y no que los de su especie han desaparecido de la faz de la tierra porque si no, qué vida más triste, ¿no?

viernes, 13 de diciembre de 2013

Reyes Magos adelantados

Justo cuando mi situación de prebancarrota perpetua estaba alcanzando niveles preocupantes, fuentes generalmente bien informadas (es decir los Speedypadres) me han chivado que los Reyes Magos tienen previsto hacer una inyección de capital en mi sistema financiero. ( ¡¡YUJU!! Desde aquí un beso a Sus Majestades de Oriente, siempre tan oportunos) Normalmente no hago caso a los rumores para gestionar mis inversiones y recursos, pero como sé que los Speedypadres manejan información privilegiada y que de sus chivatazos me puedo fiar, ya he empezado a gastar dinero a cuenta de los hipotéticos fondos que voy a recibir dentro de no mucho. Vamos, lo mismo que hizo todo perro pichichi en los tiempos de la burbuja inmobiliaria, vivir a crédito, pidiéndole dinero a la tía del anuncio de la lejía, que viene del futuro.

Total, a lo que iba, que esta semana me he podido dar algunos pequeños homenajes y el primero de ellos ha sido, como no, comprarme un libro. Que a vosotros no os parecerá gran cosa, pero yo tuve que aplicar en mi economía unas medidas de ahorro y racionalización del gasto (por no decir recortes mondos y lirondos) que hacen palidecer a las genialidades de Mariano y sus compinches. La cosa se puso tan cuesta arriba que no me quedó otra que recortar todas las partidas del presupuesto destinadas a bienes que pudieran conseguirse gratis. Y la decisión presupuestaria se tomaba haciendo esta pregunta: ¿Los filetes de pollo los prestan 15 días en la carnicería sólo presentando el carnet de socio? No ¿verdad? Pues ya sabes la partida que se va a recortar. Y así con todo lo demás.

Por eso hacía bastante tiempo que no me compraba un libro y por eso precisamente me he reenganchado a este vicio con una apuesta segura: Jabois. Jabois es siempre una buena idea y más en estos días, que necesito risas como el comer. Lo más curioso del asunto es que, a pesar de que las carcajadas que proporcionan esos textos son muchas y potentes, no son lo mejor de este homenaje que me he dado por Cortesía de los Reyes Magos adelantados. Lo mejor es que con el libro me he regalado también los trayectos de bus. Y me voy a explicar.

El curro, la Supermovida, alemán y demás marrones me tienen la vida colapsada, ya lo sabéis. El estrés, los agobios y el cansancio que esto me provoca son duros, pero no son lo peor. Lo peor es que estoy siempre haciendo algo y cuando no, DEBERÍA estar haciéndolo. Me falta tiempo para llegar a todo, por eso cada minuto lo quiero rentabilizar, para no perderlo: me leo los apuntes de no sé qué mientras me toca el turno en la frutería, pienso la redacción de alemán en la sala de espera del médico, me invento una solución a un marronazo laboral andando por la calle... todo en ese plan. Dado que la mitad de mi vida transcurre diariamente en un bus de camino hacia alguna parte, esos ratos tampoco son míos, sino de la movida de turno. Y eso es un estrés.

Así que he decidido que se acabó y que junto al libro de Jabois me voy a autorregalar los trayectos en transporte urbano. Ese tiempo vuelve a ser mío y por eso, apuntes, agobios y estreses se van, momentáneamente, a tomar por saco.

Hola lectura, hola risas, hola desconectar. Cuánto os echaba de menos.

miércoles, 11 de diciembre de 2013

Culocagao

Es duro admitir esto en mi condición de superheroína dedicada a defender a la Humanidad, pero soy bastante culocagao, la verdad. Para vuestra tranquilidad os diré que en la lucha contra los malos se me nota más bien poco, porque como ocurre en casi todos los trabajos, al final te acostumbras y no te das ni cuenta de lo que haces. Pero en el resto de mi vida pues sí, soy bastante culocagao, para que os voy a engañar.

Y no me crucifiquéis, que ya sé que esto es un horror. LO SÉ. Y en el pecado llevo la penitencia, porque el miedo está detrás de muchos de mis fracasos. El miedo me bloquea en momentos clave. El miedo mina mi autoconfianza. El miedo me roba buenos momentos. El miedo distorsiona mi visión de la realidad. El miedo ralentiza mi capacidad de reacción. El miedo me PUTEA. Y eso es una caca de la vaca Paca.

Sobre todo porque ahora pienso que uno de los temas en los que más culocagao he sido en esta vida ha sido en asuntos cardíacos. Entre que me enamoro poco (tirando a poquísmo), que tengo un asombroso gafe para que los implicados sean callejones sin salida y que podría pulverizar el record mundial en invención de excusas, la verdad es que he hecho pocas locuras por amor. Muy pocas. Y es una lástima, porque las locuras por amor son de las pocas cosas en la vida que merece la pena hacer. De las pocas que cuando echas la vista atrás te alegras de haber hecho, acabaran como acabaran. Porque le echaste un par y lo intentaste que, al final, es lo único que importa en asuntos del corazón.

Por eso ahora pienso que tendría que haber dicho más, "tú me completas" o que estar contigo hace "que quiera ser mejor persona". Debería haber dejado más claro que "prefiero discutir contigo que hacer el amor con otro" y garantizarte que "habrá épocas difíciles y que en algún momento uno de los dos o los dos querremos dejarlo todo. Pero también te garantizo que si no te pido que seas mío... me arrepentiré durante el resto de mi vida, porque sé en lo mas profundo de mi ser, que estas hecho para mi".

Supongo que cada vez que no lo dije había buenas razones para no hacerlo. Muy buenas, incluso. Pero ahora, desde la distancia, esos motivos no me parecen ni la mitad de buenos. Así que he decidido que se acabó. Que a partir de ahora menos pensar y más hablar. Que al miedo ni agua. Y que el amor nos cosa a leches.

lunes, 9 de diciembre de 2013

Lunmartes del horror

Tic tac tic tac tic tac
Se acerca el momento. No hay escapatoria. Es imposible evitar la catástrofe.

...
...
Se acaba el puente y mañana tengo que ir a trabajar.

¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡NOOOOOOOOOOOOOOOOO!!!!!!!!!!!!!!

No quiero ponerme dramática, pero esto es un horror. Deberían inventar unas pastillas para suavizar la transición de días libres a vuelta al curro porque la cosa se pone cada vez más cuesta arriba. ¡Madre del amor hermoso, qué suplicio! Lo estoy pasando fatal. Y el tema empeora además porque hoy en Speedytown ha sido un día de esos odiosos. De los de mucha mucha niebla. De la de verdad. Tanta que casi podías llegar a cualquier sitio, que te abriera la puerta Bertín Osborne y tú aparecer disfrazada de Whitney Houston. Una pasada.

Por suerte no todo el puente ha sido así. Hubo un momento, cuando aún era feliz porque me quedaban muchas horas libres por delante, en que brilló el sol y yo cacé unos cuantos rayos sentada en mi terraza. Allí repanchingada, sin prisas ni nada que hacer, después de haber dormido nueve horas y saboreando una buenísima taza de chocolate caliente pensaba que si existe un paraíso, tiene que parecerse a eso. Y para terminar de redondear la jugada, sonaba esta preciosidad de canción. Creo que voy a necesitarla para superar este lunmartes del averno, así que la posteo.

A los que lleváis esta tortura china de vuelta al curro mejor que yo, ya me diréis con que os supervitamináis y supermineralizáis, para pedirle a los Reyes Magos un cargamento de eso. A los que estáis más en mi onda, ánimo, que...

                                     ¡¡¡YES WE CAN!!

(Espero)

viernes, 6 de diciembre de 2013

Un, dos, tres, responda otra vez

Allá por el Pleistoceno superior, la Doctora desde su otro blog me dio un premio (¡¡GRACIAS!!!), y como estoy colapsadísima total no me había dado tiempo a publicarlo. Pero como todo llega en esta vida, aquí está.

 
 
Ese es el premio y estas son las normas:

1. Nombrar, agradecer y seguir al blog que te nominó.
2. Responder a las once preguntas que te han planteado.
3. Nominar a 11 blogs con menos de 100 seguidores y dárselo a conocer.
4. Plantear 11 nuevas preguntas.

Así que vamos a ello, a responder a las preguntas de la Doctora, que son muy suyas:

1. Si tuvieras que cambiarle el nombre a tu blog, ¿cuál le pondrías?

Esa es la pregunta del millón, llevo la tira de tiempo pensando un nombre para una nueva aventura internetera (que ahora no tengo tiempo de empezar NI DE COÑA) y nunca encuentro ninguno, porque idea guay que se me ocurre, idea que está cogida por algún listillo bloguero (cabrones, que sois una panda de cabrones). Así que si se me ocurriera algún nombre chulo aquí lo iba a contar, para que me quitéis la idea. Si, ya, claro. Ni de-co-ña.

2. Conoces a tu pareja ideal, te enamoras y el sentimiento es mutuo, pero de pronto un día te dice que en su opinión todos los que escriben blogs son unos gilipollas, ¿qué haces?

Impugno esta pregunta por incompatibilidad con la vida real porque: Primero,  mi pareja ideal no haría una generalización tan absurda y segundo y más importante, con todo lo que hablo del blog, el tema habría salido muy al principio. ¿Y aún así me habría enamorado de él? No sé yo...

3. Entre no volver a escribir en un blog nunca o no volver a tener sexo oral nunca, ¿qué elegirías?

No contestaré si no es en presencia de mi abogado ;P

4. A partir del mes que viene la única forma de escribir un blog es pagar una mensualidad, ¿cuánto es el máximo que estarías dispuesto a pagar?

A partir del 22 de diciembre, lo que haga falta, este año el premio gordo de la lotería lleva mi nombre, así que en 2014 tendré el dinero por castigo.

5. Aparece un nuevo comentarista en tu blog, parece muy majo y educado, pero acaba todos sus comentarios diciendo "Viva España, viva el rey, viva el orden y la ley", ¿qué haces?

Decirle que esa rima revela su talento para la poesía y animarle a que escriba un libro de sonetos a ver si le dan el Nobel de Literatura.

6. Si tu blog empezase a hablarte, ¿irías al psiquiatra o lo aceptarías como un amigo más?

Bueno, teniendo en cuenta que hablo (fundamentalmente insultos, la verdad) con los muebles de casa con los que me tropiezo y que tengo verdaderas discusiones con el cacharro que tengo por coche, que el blog me hablara me haría hasta ilusión.

7. Se planta en tu casa un inspector de hacienda y te pregunta si tienes un blog, ¿le dices la verdad o lo niegas para quitarte de líos?

Más bien le meto una chapa sobre el blog a ver si se olvida del verdadero motivo por el que ha venido a hablar conmigo, que supongo que tienen más que ver con mi declaración de la renta que con mi afición a la escritura.

8. Descubres que tu bloguero favorito es en realidad Ana Botella, ¿qué haces?

Invitarle a una relaxing cup of café con leche a ver si así me confiesa quien es su negro, porque dudo mucho que me guste como escribe Ana Botella. Muchísimo.

9. ¿Si te pagasen 20.000 euros te tatuarías el símbolo de Blogger en el cuello?

Dada mi situación de prebancarrota perpetua y que ahora los tatuajes se borran con laser, sí, creo que me tatuaría.

10. De pronto un día se te aparece la Virgen María, te mira fijamente, te dice "Tu blog es una mierda, colega" y desaparece sin más, ¿qué haces?

Pues sorprenderme de los modernizadas que están las apariciones marianas últimamente, ¿no?

11. Crees que en la blogosfera hay demasiados blogs que hablan sobre...

¿Con la crisis blogoesférica actual, que cierran todos los blogs? No hay demasiados de nada, en todo caso, demasiado pocos.

Y ahora e toca a mi preguntar:

1.-¿Recuerdas quién te metió en esto de los blogs? El primero que te nombró esa palabra cuando no sabías nada del tema y le contestaste: ¿Un qué?

2.-¿Qué es lo más raro que te han dicho en un comentario de una entrada?

3.-¿Qué bloguero ilustre, de esos que escriben genial y que tienen mogollón de seguidores y comentarios, te gustaría que entrara en tu blog para decirte: "Me encanta como escribes, me quedo"?

4.-¿Prefieres que los enlaces de un blog se abran en una ventana nueva o en la misma en la que estás?

5.-Si te encontraras al iluminado de Blogger que se inventa todos esos cambios en la interfaz que hasta que te acostumbras son horribles e incomodísimos, ¿qué le dirías? ¿Darle una colleja para que espabile forma parte de tus planes?

6.-¿Cuánto tiempo te cuesta escribir una entrada, de media? ¿Cuál es la que más has tardado en escribir desde que empezaste en esto?

7.- ¿Cuál es el máximo de intentos que has tenido que hacer para dejar un comentario cuando la palabra de verificación no se entiende ni de coña? ¿Eres de los que insiste o a la segunda piensa: "oye, mira, que paso?

8.-¿Qué es lo más te llama la atención la primera vez que conoces "virtualmente" un bloguero, su nick o su imagen de perfil?

9.-¿Cuántas veces han intentado ligar contigo a través del blog (ya sea en los comentarios o mandándote un correo?) ¡CONFIESA!

10.-Twitter ha hecho desaparecer a muchos blogueros estupendísimos, que ahora prefieren dedicar su tiempo a escribir en 140 caracteres. ¿A quién echas de menos? ¿Qué bloguero te gustaría que volviera a la blogoesfera activa?

11.-Estabas deseando llegar al final de esta tortura de preguntas, ¿verdad?

Y ahora toca nominar a 11 blogs, pero dado lo desinflada que está la blogoesfera últimamente, me parece misión imposible, así que voy a proponérselo a unos cuantos, por si les apetece. Por ejemplo a Pseudo, a Papacangrejo , a Holden, a Sese, a Bich, a JuanRa, a Anusky y a ECDC o a su primo Loqueleo. Que como no he revisado, supongo que a muchos ya os habrán dado este premio antes, así que mira, una cosa menos que tenéis que hacer, ¿no?

Los demás, ale, al tajo.