Si el maestro Yoda pasara cerca de mí seguramente captaría una perturbación en la Fuerza y me diría eso de "el reverso tenebroso es fuerte en ti". Bueno, supongo que sus palabras serían más algo como "En ti el reverso tenebroso fuerte es", que no quiero que venga algún fan total de las Guerras de las Galaxias a decirme que me invento cosas. Pero en fin, que la idea de fondo está clara, ¿no? Me parezco más a Darth Vader que a Luke Skywalker.
Podríais pensar que es porque el miedo lleva a la ira, la ira lleva al odio y el odio lleva al sufrimiento y como yo soy un pelín culocagao, pues que de ahí viene todos mis males y mi pasaporte directo al Lado Oscuro. Pero no, la cosa no es tan sencilla, que algo os tendré que contar en esta entrada además de destrozarle las frases a Yoda...
El caso es que yo vine mal de fábrica. Igual que hay gente que tiene tendencia a engordar, a tener contracturas en la espalda, a coger gripes o a sufrir otitis yo tengo tendencia a ser pesimista. Es mi forma de ser, lo que me brota natural. Si no hago nada para evitarlo lo veo todo negro tizón. No os imagináis hasta qué punto. Si me dejo llevar, soy de las que miran un donut y sólo ven el agujero. Así de triste como os lo cuento.
Sé que esta inclinación no me aporta nada positivo así que lucho cada minuto de cada hora contra esta mala costumbre. Cuando empiezo a imaginarme dragones y mazmorras en el horizonte, mi táctica es no obsesionarme y hablar con gente, porque la mitad de las veces el 90% de la peña estamos en las mismas y si los demás tiran pa'lante, por qué no voy a poder yo con la que se me venga encima, ¿no? Procuro tranquilizarme y recordar marrones antiguos, para no olvidar que ya antes he salido de cosas peores. Intento relativizar y pensar que en esta vida todo tiene remedio menos la muerte. Me esfuerzo en tener presente que adelantar problemas y sufrimientos futuros no sirve para nada y que ya cruzaremos ese puente cuando lleguemos a ese río. Pongo todo de mi parte, pero el reverso tenebroso es fuerte en mí y a veces me puede, lo reconozco. Por eso me parece tan curioso lo que pasa en la Supermovida, porque en ese marronazo del infierno, la positiva, la optimista y la confiada en el futuro soy yo. Quién me lo iba a decir a estas alturas de la vida.
El tema es que la Supermovida es un movidón de tres pares y a la mayoría de mis compañeros este grado de tortura china le ha cogido por sorpresa. Muchos no se esperaban este nivel de sufrimiento ni creían que les iba a colapsar tanto la vida, así que varios lo dejaron pronto. Desde entonces casi cada semana hay alguien que se tira del barco y este mes del horror está haciendo verdaderos estragos. En mi clase ya se puede oír el eco. Y lo que te rondaré morena.
Entre los pocos que resistimos, la desesperación campa a sus anchas. Estamos agobiados, superados por los acontecimientos y pelín frustrados así que cada día aparece alguno por la puerta diciendo que está hasta los mismísimos y que se raja. Y a los demás nos toca hacer tareas de contención. El tema es que el turno es rotatorio, al que hoy quiere mandarlo todo a tomar aire fresco, mañana le tocará apuntalar unos cuantos diques, así que todos nos sabemos muy bien la teoría de por qué hay que resistir a toda costa:
-Porque a estas alturas ya no. No se sufre 5 meses para tirarlo todo por la borda cuando queda menos de la mitad. Se nos ha pasado el arroz. Esos sirocazos al mes. Ahora ya ni de coña.
-Porque podemos. Porque los de la Supermovida del año pasado aprobaron todos, yo les he visto la cara y esos no son más listos que yo. Ni cocinan mejor. Si ellos pudieron nosotros también. Y no hay mas que hablar.
-Porque, aunque ahora parezca que no, al final lo que nos tiene que hacer click en el cerebro nos lo terminará haciendo. En realidad estoy convencida de que ya ha habido un miniclick. No nos acordamos porque cualquier tiempo pasado parece mejor, pero el primer mes fue el horror de la desesperación elevada a la enésima potencia. Ahora el tema se ha complicado, nos atacan por todos los flancos y hay más cantidad de sufrimiento pero menos denso. Y confío en que se siga licuando.
La teoría me la sé de perlas, pero el reverso tenebroso es fuerte en mí. Así que si algún día me veis que flojeo, recordadme esta entrada. Yo me la pongo en favoritos, que me huelo que me va a hacer falta...
Ponlo bien a la vista ¡¡El reverso tenebroso!!, aunque yo lo rebautizaría como el post de La toalla, por aquello de NO TIRARLA JAMÁS.
ResponderEliminar"yo les he visto la cara y esos no son más listos que yo" jajaja, me gusta el razonamiento.
Saludos y ánimos
...y ánimos (así, remarcando)
Yo miro un donut y me lo como, no me da tiempo a pensar en su agujero xD
ResponderEliminar¡Mucho ánimo! Como tú bien dices, ya sólo queda seguir hasta que termine.
Pues eso, joven padawan, dale caña a la Supermovida y no te dejes seducir por el lado oscuro.
ResponderEliminarAdemás, creo que te organizas muy bien con tus planes por objetivos y tu constancia. Si hay alguien que puede con estos proyectos ambiciosos, eres tú.
Mantenme informado. :P
¡Buena semana!.
Para cuando venga la desesperación, otra imprescindible de Yoda que me aplico regularmente: "hacer; o no hacer. No intentar."
ResponderEliminar(obviamente hay que hacer!)
Animo!
Anónimo F
Si hasta Darth Vader acabó saliendo del lado oscuro... ¡tú puedes! Es como lo de la Supermovida del año pasado que decías, si ellos pueden tú también. Voy a buscar ahora una web de apuesta para poner algo de dinero en tu éxito. Que sí, que vas a poder con todo. Seguridad absoluta, trabajo duro... y el premio llegará. Y luego nos lo cuentas.
ResponderEliminarSea lo que sea esa supermovida, no debería acabar ni con una superheroina, ni con sus huestes, por menguadas que a estas alturas sean. Los que habeis resistido lo hicisteis porque ganareis ... aunque aún no lo sepais. Solo es cuestión de asumirlo.
ResponderEliminarJuanRa, pues gracias. Y GRACIAS así, remarcado jajaja ;P
ResponderEliminarHolden, yo los donuts también me los como, con agujero o sin él. jajaja
Tarambana, thanks, te mantendré informado ;P
Anonimo F, creo que Yoda es tu autor de cabecera, esa cita ya me las has dicho alguna que otra vez en otras entradas jajaja Es un buen consejo, la verdad ;P
Bueno, Juan, pues gracias y a ver si es verdad y os lo cuento
Euclides, ayyyyy, es verdad que no lo sabemos jajaja Ojalá lleves razón ;P