jueves, 24 de febrero de 2022

Seguimos para bingo

 

Bueno, amics, pues pasamos de pandemia a guerra mundial sin solución de continuidad. ¿Cómo os quedáis?

Yo estoy que no me lo creo. En los peores momentos del CoronaApocalipsis resistía pensando que ese infierno era "la guerra civil" de nuestra generación y que cuando lo superáramos ya no nos tocaría sufrir un putadón de ese nivel. ¡Ingenua de mí! No me acordaba que desde el 2020 cada año le dice a su sucesor: ¡sujétame el cubata!

Ahora me parece increíble, pero hasta ayer no estaba ni mínimamente preocupada por este tema. A pesar de la mala vibra del transcurso de los acontecimientos, ni por un momento me llegué a plantear que hubiera una sola posibilidad de llegar a un ataque real. Salimos de una pandemia, pensaba. Todo el mundo está cansado, harto, ha muerto hasta el apuntador y las economías siguen tocadísimas. ¿Quién tiene ahora pasta, capacidad y SOBRE TODO ganas de meterse en una movida de tiros? Bueno, pues se ve que Putin tiene ganas por todos. Por él, por todos sus compañeros y por él primero. Yo flipo.

Que Putin es un transtornado queda más que demostrado en los acertadísimos millones de memes que hay de él en Twitter. Sin embargo, era un tarado que controlaba. O sea, sin ningún tipo de escrúpulo ni decencia, pero sabiendo los límites que no le convenía rebasar. Por eso ahora mi miedo es que esto no sea una muestra de que se le ha pirado la pinza total. Ojalá, eso sería el mal menor.

Mi miedo es que esto sólo sea el comienzo de un plan tipo villano de Marvel. Y que haya muchas cosas con las que no contamos. Un arma nueva letal decisiva en caso de bullullu bélico gordo. Un aliado potente que por ahora dice que la cosa no va con él, pero que en realidad está disimulando para intervenir cuando sea oportuno. Que ya tengamos al enemigo en casa, en nuestros ordenadores, en nuestros móviles... Puf, se me ocurren un millón de escenarios apocalípticos, casi mejor dejo de imaginar.

Por favor, 2022, baja revoluciones. No nos hace falta tanta emoción, en serio, no es necesario que compitas con pandemia. Al público ya nos va bien un poquito de tranquilidad. 


¡¡¡DE VERDADDDDDDDDDDDD!!!

4 comentarios:

  1. Uf, esto es terrorífico. Estas cosas se sabe cómo empiezan pero no cómo acaban.
    Los ucranianos hasta ayer tenían una vida normal: iban a trabajar, al cole, al centro comercial... Y de repente hoy empiezan a caerles bombas. Parece una pesadilla.
    Y lo que dices: ahora que empezábamos a sacar la cabeza después de la covid, otra vez todo mal.

    En fin, habrá que llevarlo lo mejor que podamos, ayudarnos unos a otros y esperar que las sanciones funcionen. Pero vaya mierda.

    ResponderEliminar
  2. La sorpresa hubiera sido que Putin no atacara. Con esta hay una guerra más. Y no será la última.

    ResponderEliminar
  3. Tarambana, sí, es una auténtica mierda. Lo que más me ha impresionado de todo es eso, que ni los propios ucranianos se lo esperaban, estaban totalmente tranquilos hasta hace dos días.

    Cabronidas, eso desde luego. Por desgracia, no será la última

    ResponderEliminar
  4. Al final nos vamos a acostumbrar a las desgracias.

    Besos.

    ResponderEliminar

¡Eh, no te vayas sin decir nada! No tengo el superpoder de leerte la mente.