Estoy en desacuerdo con muchos aspectos de mi misma, así que a menudo me sorprendo pensando cosas como "me gustaría ser el tipo de persona que recuerda datos cruciales y convence a todos en cualquier conversación", o "me gustaría tener la agilidad mental de Zrutanito" o "la habilidad social de Jaimito, que propone planes o quedadas y hace amigos nuevos a velocidad de crucero". Y bueno, todo eso estaría muy bien, por supuesto. Pero no. El otro día vi claro el tipo de persona que me gustaría ser. Y lo vi claro, quién iba a decirlo, en el gimnasio. Ahí lo lleváis.
Digo el otro día porque uso esa unidad de medida para cualquier espacio temporal entre ayer y hace tres años, pero vamos, en realidad a saber cuando pasó esto. Muy a mi pesar el CoronaSuplicio (la nueva digievolución del CoronaApocalipsis) no me deja aparecer por el gimnasio, así que esto ocurriría, supongo, en algún momento de la vieja (y taaaaaaaaaaan añorada) normalidad.
Partamos de la base en que yo antes era una de las más habituales del lugar y tenía mucha confianza con varios profes. Las risas y las tontadas en clase estaban a la orden del día y yo daba bastante rienda suelta a mis lerdeces, la verdad. Aún así...
PROFE MAJÉRRIMO-LOCO.- Tenéis que estar un siglo en sentadilla isométrica sin incorporaros para descansar. Quien quiera levantarse, tiene que contar un chiste. Cuanto más malo, mejor.
Speedy (SÓLO mentalmente).- ¿Por qué los elefantes no montan en bicicleta? Porque no tienen dedo gordo para tocar el timbre.
Quería levantarme para descansar. Quería contar ese chiste, que es el rey ABSOLUTO de los chistes malos y (precisamente por eso) me encanta. Pero me callé. Por culpa del Troll PorCulero (PorCu) de mi cabeza.
PorCu.- No se te va a oír. Nadie va a entender esa mierdaca de chiste que es del año catapún. Nadie se va a reír. Vas a quedar como que quieres ir de graciosa y no tienes ni puta gracia. Vas a quedar como una idiota. Vamos, como lo que eres.
Todo eso dijo PorCu en tres milisegundos. Qué velocidad para dar por culo, oye. Y me callé. Por no quedar como una idiota, cuando en realidad, bueno... Sí que soy un poco idiota. Como todos, ¿no?
Y entonces pensé que el tipo de persona que REALMENTE quiero ser es de esas que no tienen un PorCu en la cabeza dando la turra antes y después de hacer (o no) cualquier cosa. Que quiero ser de ese tipo de personas que disfrutan de la risa y que defienden a capa y espada CLASICAZOS de los chistes malos como esos. De ese tipo de personas que hacen lo que quieren y lo que les apetece en cada momento sin que en su mente se desate un tsunami de improbabilísimas e hipotéticas consecuencias negativas. De esas personas que les da igual lo que piensen los demás.
Ese es el tipo de persona que me gustaría ser.
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¡Eh, no te vayas sin decir nada! No tengo el superpoder de leerte la mente.