¡Hola corazones!
¿Qué tal se han portado lo Reyes Magos con vosotros? Seguro que bien, que sois buenos chicos...
Conmigo Sus Majestades de Oriente siempre mantienen el nivel y un año más no han defraudado. Ahora, también es cierto que esta vez se han dejado algo pendiente. Les había hecho una petición pro, un encargo nivel experto, que ni ellos con todos sus poderes podían conseguirlo en un solo día, así que les he dado un plazo razonable, que vayan trabajando en ello y ya si eso cuando lo vean más claro que me den un toque. Lo que viene siendo un regalo en diferido en forma de simulación al más puro estilo Cospedal-Bárcenas.
¿Que qué regalo se me había ocurrido poner en mi carta para que hasta los Magos necesiten una prórroga? Pues un noviete. He decidido que en 2017 mi sequía absoluta eterna se va a acabar y que este año quiero mimitos y que me cuiden y que me traten bien, que ya me va tocando. La cosa es que, para que Sus Majestades no se confundieran y me trajeran un maromo que no va conmigo, se me ocurrió describirles en mi misiva qué tipo de novio quería. Y claro los Reyes se han quedado un poco flipados, los pobres, porque me he puesto a pedir y me he quedado sola.
Les he dicho que no se agobien, que no hace falta que el chico que me traigan sea guapo en plan Ian Somerhalder, que con que tenga un "algo" (por lo menos para mí) me conformo. Y que si echan un vistazo a mis exs se darán cuenta que esa no será ni de lejos la dificultad del encargo.
Les he explicado que lo más importante es que sea un tío legal, en el que se pueda confiar, honesto, sincero y que sepa guardar los secretos (no sólo los míos, sino los del cualquiera). Que también le tendrían que interesar muchas cosas (casi todo) y gustarle pensar planes nuevos y probar cosas distintas. Y que ganaría muchos puntos (muchísimos) si fuera gracioso o, mejor aún, ingenioso, porque implicaría que es un tipo listo.
Les he contado que además sería ideal que tuviera creatividad y disfrutara con el arte. pero no en plan snob "en esta obra se atisban las obsesiones del autor" sino más bien que le toque la patata un espectáculo de teatro o que le mole una peli que no necesariamente esté llena de tiros ni efectos especiales impresionantes. Que estaría genial que le gustara leer y comentar conmigo lo que lee y que ya sería la bomba si fuera tan tan tan fan de escribir como yo. Es más, les he soplado a los Reyes que si encuentran a un chico que sepa escribir bien, que no lo pierdan de vista, porque será muy posible que cumpla también muchas de mis otras peticiones, que se lo digo por experiencia.
Eso sí, les he dejado muy claro a Sus Majestades que el maromo que me traigan me tiene que tratar bien. No, no, sólo bien no, BIEN con mayúsculas. Tiene que valorarme y ser muy consciente de que, pese a todos mis defectos, en conjunto soy una pasada y que tiene muchísima suerte de estar conmigo (la misma suerte que tengo yo de estar con él, vamos). Por eso me lo demostrará cada día con tontadas que sabe que me llegan como traerme por sorpresa un boli chulo en esa papelería que me encanta, dejarme la última chocolatina de la despensa por si he tenido un día de horror en el curro y NECESITO MI DOSIS o escribirme mensajes subliminales como este de abajo en los sitios más inesperados.
Y por supuesto los Magos ya saben que el tío que me regalen tendrá que respetarme, cuidarme y escucharme tanto como yo a él, es decir, UN MONTÓN, Supongo que, dado lo sabios que son, Melchor, Gaspar y Baltasar tienen claro que les queda mucho curro por delante para cumplir mi encargo, pero oye, mala suerte, es su trabajo, haber elegido muerte, que decía el chiste. Y si no pueden encontrarlo ellos que tienen poderes regalísticos infinitos, ¿quién podría?
¡Suerte!
ResponderEliminarVeo que tienes las ideas claras. En alguna parte hay un guapo, inteligente y detallista escritor deseando que los Reyes le traigan una Speedy, eso seguro.
ResponderEliminarLo más difícil va a ser encontrar a uno que te guarde la última chocolatina... ;D
Pseudo, me va a hacer falta ;P
ResponderEliminarTarambana, eso de la chocolatina es siempre lo más difícil... jajaja