miércoles, 14 de febrero de 2018

El Desafío Aórtico III: De vuelta al gimnasio

Seguimos para bingo con el Desafío Aórtico. Si veo que se hace muy pesado igual termino reagrupando las tarjetas, porque vais a acabar hasta el toto. Pero oye, qué menos que aguantar la primera semana, aunque sea, ¿no? Pues eso.

Tarjeta 3: Inicia una rutina de entrenamiento

Por suerte, estos deberes también los tengo hechos. Ya conté por aquí que el curso pasado, contra todo pronóstico, me convertí en una usuaria habitual del gimnasio. Después el verano y una versión compactada de la Supermovida me colapsaron la vida y me pegué seis meses sin pegar palo al agua, peeeero en noviembre volví al redil deportivo. Con menos intensidad porque no tengo tanto tiempo, pero ahí estamos, poco a poco.

Eso sí, no sería mi vida si no hay drama, así que ahora la pregunta obligada es: ¿Qué drama? Pues el DRAMÓN es que esos seis meses de exilio gimnástico me han pasado factura en forma de unos cuantos kilos polizones que se me han colado al abordaje. Unos cuantos DEMASIADOS, que no sé yo cómo no me había dado cuenta del tema, porque telita. Pero el caso es que no me había coscado y el otro día al mirar la báscula casi me da un ataque al corazón, así que he tenido que tomar medidas drásticas en forma de dieta extrema: 15 días sin gluten y sin lactosa. ¡A lo loco!

Ya lo sé, esto también os suena. Mi vida es un bucle permanente como el Día de la Marmota pero contada por escrito en un blog, qué horror. Lo bueno es que entonces no aguanté los 15 días ni de coña y ahora con el tema este del reto tengo más motivación. De hecho ya llevo media semana y mantengo la ansiedad medio bajo control. Bueno control, control va a ser mucho decir... pero al menos no siento la tentación de atracar cada pastelería que veo con una recortada para zamparme todas sus existencias... Algo es algo.

Esta tarjetita va a ser dura, lo veo y eso que se suponía que traía los deberes hechos. Si es que ya son ganas de complicarme la vida...

4 comentarios:

  1. Madre mía, estamos igual en el tema de volver al deporte y bajar kilos (en mi caso del embarazo retrasados un año después), pero yo ya he recurrido a "tirar de tarjeta" y contratar a un entrenador personal. Llevo un mes diciendo "tengo que ir a correr" y yo si no me meten caña no voy. Soy así de imbécil.

    Ánimo y espero que te enganches bien al gim y pierdas esos kilos de más (que recordando tu constitución, serán pocos). Qué envidia, yo necesito a alguien que me anime y me haga llorar. Me he vuelto vaga :(

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  2. A los gimnasios van treintañeros buscando polvo. Lo que digo con envidia tanto por treintañeros como por lo ultimo.
    Seguiiiiiiiimos.

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  3. Misa!! Como vas con tus aventuras viajeras supermami??!! A mi las madres con chiquitines que encontráis tiempo para cuidaros me parecéis unas heroínas!! Eso sí que es un milagro, con todo el trabajo que dan los niños! Qué vaga, ni qué vaga, eres una campeona por ponerte las pilas!

    ECDC y esa es la sólida conclusión del profuso y detallado estudio de campo que has hecho en diversos gimnasios, ¿no? jajaja Te veo a tope con esta serie de entradas, Seguiiiiiiiiiiiimos!! ;P

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  4. ¡Ánimo!...que quince días no son nada.

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¡Eh, no te vayas sin decir nada! No tengo el superpoder de leerte la mente.