El origen de la guerra a los kilos que está a punto de comenzar ya os lo he contado, pero por si hay algún despistadillo por ahí, lo resumiré: Supermovida + estreses +nervios +nada de tiempo para hacer ejercicio= báscula descontrolada. Como diría Speedymum, "báscula, de eso nada monada" (expresión ochentera donde las haya) así que aquí estoy, buscando soluciones.
La revelación la tuve un día en el supermercado, recién acabados mis millones de exámenes, cuando me saltó el botón de los vaqueros por la presión de mi incipiente tripita. Un rayo iluminador me deslumbró y metí en mi carrito una crema anticelulítica del Mercamola que por cinco euros quita la celulitis que yo te diga, pero en fin, eso es otra historia. El caso es que el rayo iluminador no tuvo el suficiente poder como para hacerme devolver a las estanterías las patatas bravas y los bollos de chocolate que había cogido 10 minutos antes y fui a pagar con mi crema antimichelines en la mano y un carrito de la compra que si lo ve el inventor de la dieta mediterránea se corta las venas. La cajera me cobró todo lo rápido que pudo, claro, porque debió de pensar que era una enferma de trastorno bipolar en pleno cambio de ciclo. Y no puedo culparla, la verdad.
Total, que para lo de la comida ya estoy mentalizada. Ayer me cené unos huevos rotos que os debisteis de enterar hasta vosotros porque tembló la tierra de lo buenos que estaban, pero fue mi despedida. A partir de ahora voy a ser buena con ese tema. Palabra de exploradora. La otra pata de mi plan es el ejercicio físico. Y amigos... ahí viene cuando la matan.
Porque a ver, no es que yo antes hiciera poco deporte, es que este curso del horror en el que no he tenido tiempo ni de respirar he estado taaaan parada, que levantarme y sentarme dos veces en el sofá ya me contaba como abdominales y sentadillas porque algo es algo. No os digo más. Eso da como resultado que ahora mismo mi forma física es lamentable no, lo siguiente y que empezar a moverme me cuesta un triunfo. Así que este fue mi proceso mental para urdir esta pata de mi plan:
"Podría hacer una carrerita diaria de 30 minutos... pero dado que cuando corro 20 metros para coger el autobús se me sale el corazón por la boca, lo veo una opción poco realista. Hombre, lo ideal sería encontrar un maromazo de ojos verdes y cuerpo perfecto con el que quemar calorías y subir mis niveles de endorfinas de la forma más agradable del mundo pero eso sería más a largo plazo porque habría que empezar buscando un voluntario y yo quiero resultados rápidos, que tengo una serie de entradas para el blog que escribir. Mi bici está para el arrastre, ya voy andando a todas partes... A veeeeeeeer, ¿qué puedo hacer? ¿qué puedo hacer?..."
La brillante idea que salió de ese proceso mental os la contaré en el próximo post. Sólo os diré que el tema empieza conmigo en el suelo después de una caída, con dolores en músculos que ni sabía que tenía y que esa entrada se va a llamar "Supercotocloc cotocloc".
(¡¡Auuuuuuu, qué dañoooooo!!)
Pues si no vas a correr ni a montar en bici y te has caído deduzco que te has puesto a aprender brak dance, que debe quemar calorías también :)
ResponderEliminarTe llevo ventaja.
ResponderEliminarAyer empecé a andar, hora y media a ritmo rápido y de dulce sólo una tostada con miel.
Hoy he andado dos horas y de dice sólo piña y un bombón( y eso q no me gusta el chocolate).
No quiero ni pensar qué se te habrá ocurrido para darte semejante batacazo ¿trapecismo?
Diopioooo! espero que no haya sido nada grave... solo un poco tocada la autoestima de caerte y ya... esa se cura con humor!.
ResponderEliminarLos kilos tienen perdida la guerra, eso por descontado.
La crema esa no sirve. Pero las monodosis de L-Carnitina que están al lado, sí. XDDDDD
ResponderEliminarDoctora, pues poco me falta para el break dance, poco... jajaja
ResponderEliminarPseudo, y tanta ventaja que me llevas!! En mi nuevo deporte castigan a la primera que se ace a que traiga la merienda. Yo me cai y me obligaron a preparar una barbacosa. Comi solo media hamburguesa, pero si me empiezan a torpedear así la guerra a los kilos.... mal vamos!!
Totoro, se agradecen los ánimos, a ver si es verdad, porque por ahora los kilos llevan la delantera ;P
Jatz Me, ¿si? Me lo prometes? jajajaja
Ahora andas subiéndote a los árboles? Por lo que veo te van los deportes de riesgo! Espero que no sea nada, y que lo más magullado sea el amor propio.
ResponderEliminarSobre estrategias dietológicas: desayuna bien pero sano, a mí lo que mejor me va es fruta, tostada de pan integral y un vaso de leche (semi!) o un café. La tostada con lo que quieras encima, incluyendo aceite de oliva, pero sin mantequilla. Si tomas zumo de fruta, que sea de los que no tienen azúcares añadidos y con la pulpa, que la fibra hace maravillas ;-). La fruta, dos piezas mejor que una. Y ahora que es temporada, favorece las ciruelas (pero con cuidado, que si te pasas te harás muy amiga del Sr. Roca!). De carne en la comida, ternera o pollo a la plancha (sin salsa!), en raciones normalitas y sólo a mediodía. Por la noche cena ligerita, pescado blanco y ensalada (el pescado azul para la comida). Huevos como mucho dos a la semana (uno por sesión!). Y mucha verdura.
Para el ejercicio te aconsejaría hacer como Pseudo: caminar a buen ritmo un rato cada día, preferentemente por la mañana (pero después de desayunar!). En esta época te puedes levantar pronto e ir al curro caminando, por ejemplo (ida y vuelta).
Y asegúrate de dormir lo suficiente durante la noche (eso no sólo ayudará a tu cuerpo, sino también a tu bolsillo ;-) )
Anónimo F
En cierta ocasión me vi obligado a ponerme en forma partiendo de un nivel como el tuyo. Intenté ir a correr al parque que queda muy bonito yh tal y cual, pero no, que me cansaba y paraba. La única solución que hallé fue ir al gimnasio y la máquina de correr, empezar poquito a poco y cada día aumentar, ahí sí, y es que si paras de correr... trompazo que te crió.
ResponderEliminarSaludos
Pues andar una horita deprisa es muy bueno, subir por las escaleras etc yo lo de correr me lo dejo para el apocalipsis jejeje
ResponderEliminarAy, nena, que yo estoy en las mismas. Siete (¡siete!) kilazos tengo que perder yo después de un curso entero de moverme menos que una lapa en su roquita. Horreur. Ánimo.
ResponderEliminarAnonimo F, nada de árboles, no... Ahora os cuento. Por lo demás, ¡qué de consejos!, ¿no? A ver si me los aplico...
ResponderEliminarSese, no creo que estuvieras a mi nivel, por muy mal que estuvieras jajaja
Papacangrejo, lo de subir por las escaleras lo hago casi siempre y andar rápido también. Aún no saco una hora diaria de andar y meno dos... pero estoy en ello.
Misia, no sé donde ha metido blogger tu comentario. Yo lo he leido en el correo, pero aqui no aparece, así que lo copio-pego y te contesto. Msia decía...
"Ay, nena, que yo estoy en las mismas. Siete (¡siete!) kilazos tengo que perder yo después de un curso entero de moverme menos que una lapa en su roquita. Horreur. Ánimo."
Pues Misia, ya sé que mal de muchos consuelo de tontos... pero chica, saber que hay alguien más por ahí intentando perder unos kilos a mi me anima, para qué te voy a engañar. Así que ánimo a ti también... y ¡¡NOSOTRAS PODEMOS!! jajaja