domingo, 9 de marzo de 2025

Bajar la voz

Hay un viejo truco para saber si una persona está mínimamente MÍNIMAMENTE interesada en ti o en lo que estás diciendo. Y es ir bajando paulatinamente la voz, para comprobar en qué momento te pide que repitas, que no te ha oído bien. Si eso no ocurre a partir de determinados niveles, no te está escuchando.

Estoy harta ¡HARTA! de que se me reproche que no pongo lo suficiente de mi parte, que no tengo paciencia, que pido mucho. Yo tiro del carro, tiro, tiro, tiro y tiro hasta que me canso y me detengo a observar si hay relevo. Si la cosa sigue en marcha si yo dejo de tirar. Y ¡oh, sorpresa! cuando no pongo yo todo el esfuerzo, el carro se para.

Advenedizos que desaparecen de un día para otro como secuestrados por la mafia rusa. Notas que te dicen a los 50 segundos que son los presidentes del club de fans de Hitler. Condenados por malos tratos. Gente rota, traumatizada, enferma. Sosos incapaces de mantener una conversación de ascensor, no te digo ya nada con un mínimo de interés. Y muchíiiiiisima peña con cero iniciativa que nunca llega a pedirte que repitas cuando bajas la voz.

¿Y la que exige mucho y no está poniendo suficiente esfuerzo soy yo?

Un poquito de por favor.

  

No hay comentarios:

Publicar un comentario

¡Eh, no te vayas sin decir nada! No tengo el superpoder de leerte la mente.