"La Supermovida, ese gran marronazo del infierno: un estado de la cuestión".
Este podría ser el título de una tesis de dudoso rigor científico o el resumen de la actividad que me tiene colapsada la vida y de la casi no me he quejado por aquí (naaaaaaaaaada, apenas, una mijita). Pero tranquilos, que no pretendo lloriquear otra vez, sino explicaros por fin de qué va el tema. Y ahí viene cuando la matan, claro, porque la Supermovida es, por decirlo suavemente, densa, y tampoco quiero que este blog se convierta en una cura universal contra el insomnio, así que me vais a permitir que use algunas licencias literarias. Bastantes. Muchas. En fin, que cualquier parecido con la realidad va a ser pura coincidencia, pero con mucha verdad de fondo. Vamos, lo que viene siendo la tónica general de este blog, ahora que lo pienso...
Total, que para que os hagáis una idea, la Supermovida viene a ser un poco como Top Chef (recordad, licencias literarias) pero sin que los participantes sean cocineros profesionales. Allí nos hemos juntado gente que tiene un restaurante, que vive de ello, pero quiere reciclarse y aprender platos nuevos y personas que no han frito un huevo en toda su vida y lo que es peor, los fogones no les han interesado nunca lo más mínimo, así que ya os podéis imaginar lo mucho que controlan el tema. Hay unos pocos aficionados a la cocina que han llegado con los conocimientos básicos y otros que han estado antes en concursos parecidos como Master Chef y que por eso están familiarizados con la dinámica y el temario. Ya veis la panda que nos hemos juntado.
Con semejante fauna tienen que lidiar cada día dos presentadores. Uno tira más a lo Chicote, habla a la velocidad de la luz, pide silencio diciendo cosas como "¿te quieres callar de una vez, pesadilla?" y escribe en la pizarra mensajes subliminales para algunos de los concursantes tipo "el que se haya traído el cubata al plató que lo tire, que aquí sólo se pueden subir botellas cerradas".
La otra copresentadora es más estilo Carmen Sevilla en los tiempos del Telecupón. No es tan mayor, no tiene acento andaluz y no viene al plató con zapatillas de casa porque se ha olvidado de ponerse los tacones, pero es una buenaza y está todo el tiempo intentando que los concursantes pasemos a la siguiente fase del concurso. El tema es que esa no es una tarea nada fácil, dada la variedad del rebaño que os he contado en el párrafo de arriba.
Porque ella explica como se hace cualquier plato sencillo, que te digo yo, un arroz a la cubana, y después de que alguno de los experimentados le sugiera que el resultado mejoraría con tal o cual especia superfinísima e hiperdesconocida, levanta la mano un iluminado de la vida a preguntar que si para freír el huevo hay que cascarlo antes. Y que si es así, como se casca. Y claro, la pobre no sabe si tirarse al tren o al maquinista.
Lo más curioso del tema es que el 90% de los concursantes, supongo que por quedar bien frente a los telespectadores, afirman cada cosa con total seguridad, sin atisbo de duda, como si les fuera la vida en ello. Yo, que siempre he visto la cocina como la habitación inservible que hay entre el salón y la terraza, pensaba que todos mis compañeros de programa sabían más que yo. A día de hoy, finales de noviembre y después de haber oído como algunos insistían, con esa seguridad inquebrantable, en que el gazpacho se hace a base de naranjas, tengo muy claro que no todos saben tanto. Y que no hay que fiarse de la mitad del corro, por si acaso.
Y en fin, que ahí estamos, concursando. A ver quien resiste hasta el último programa. Ya os contaré.
Yo creo que, en general, nunca hay que fíarse ya no de la mitad del corro, sino del 95%. Rumores, rumores everywere. Y gente que habla sin saber. Y personas que dicen las cosas a medias malintencionadamente. La gente es una masa oscura a la que hay que temer y respetar.
ResponderEliminarPues con el panorama que planteas tu seguro, gazpacho con naranjas? buajjjjj por cierto... ¿hay que cascar el huevo antes o después de freirlo?, no me ha quedado claro
ResponderEliminarPues no me he enterado de nada. Ni de los presentadores ni de los concursantes.
ResponderEliminarParece que tú te has dado cuenta de que lo haces mejor que otros que parecía que sabían más y eso es bueno, no?
Espero que al menos te entretengas con la Supermovida (aunque te de trabajo) y que entre tanto lío saques cosas en claro, que al final es lo más importante.
ResponderEliminarSegún lo describes, yo también he estado los últimos meses inmerso en una Supermovida que cansa lo suyo (pero la mía debe ser más modesta que la tuya). Afortunadamente me he topado con compañeros muy majos y está siendo todo bastante llevadero. Espero que tú también tengas compañeros majos y, aunque tengas mucho trabajo, lo lleves bien.
¡Buen finde!
apetece tanto (tan poco) ver el programa como probar los platos resultantes de la que no sabía cascar un huevo (dile "le das un rodillazo bien dirigido").
ResponderEliminarsuerte anyway... alguien q consigue pasta haciendo pasta y comida para la mesa haciendo comida para la mesa, me alegro.
A mi me parece inconcebible que todavía haya alguien que no sepa lo más básico de la cocina. No digo hacer cosas muy refinadas, pero la supervivencia básica en la cocina no es difícil. Así que me he quedado de piedra con lo del huevo... o eso era también una licencia poética? (por cierto, lo del huevo en el microondas NO es una leyenda urbana...)
ResponderEliminarAnónimo F
No sé por qué, pero desde el principio intuí que lo de la supermovida estaría relacionado de alguna forma con la cocina.
ResponderEliminarEl del huevo es un visionario, a nadie se le habrá ocurrido nunca freir un huevo tal cual, lo mismo está rico.
En fin, buena suerte, seguro que pasas al siguiente nivel :)
Holden, pues sí, a veces la gente no tiene ni idea...
ResponderEliminarPapacangrejo, a menuda le has ido a preguntar...
END, pues no sé si es buena señal para mi o muy mala señal para los otros
Tarambana, pues sí, por lo menos los compañeros son majos, que si no, apaga y vámonos
Rafa, hacer pasta haciendo pasta es más fácil de decir que de hacer
Anonimo F, ¿el qué del huevo y el microondas? No he oído esa leyenda nunca
Doctora, pues sí, el huevo frito con cáscara es toda una exquisitez
Lo del huevo en el microondas no es una leyenda, es muy real! Mira esto: (está en inglés, pero es que hoy estoy vago y paso de buscar lo mismo en español)
EliminarAnónimo F
Espero que el grupo sea de teatro o algo inocuo, para que no sufraís accidentes me refiero, aunque alguien puede salir herido con el "atrezzo"...contigo cerca....todo es posible.
ResponderEliminarAburrirte no te aburres, no.