sábado, 8 de octubre de 2011

Protección contra veletas

De sabios es rectificar. Todo el mundo tiene derecho a cambiar de opinión. Las personas evolucionan, las circunstancias se modifican, la vida te va poniendo pruebas delante que hacen saltar por los aires tus planes y pensamientos. Cambiar de opinión no es sólo comprensible, sino recomendable cuando los acontecimientos lo exigen. Pero leñe, vamos a poner unas normas mínimas para que no nos pille el toro a todos.

Porque compañeros, esa es la cosa, que no vivimos solos. Todo lo que hacemos, pensamos, decidimos, afecta en mayor o menor medida a un número variable de personas, que se ven involucrados por nuestro comportamiento. Por eso "los veleta" (los que cambian de opinión a la mínima, vamos) no hacen más que provocar tsunamis emocionales y físicos a los pobres incautos que tienen alrededor y que se ven arrastrados por sus continuas variaciones de parecer. Para los que somos de procesos lentos y de ideas más bien duraderas, esto es una forma de terrorismo intelectual de baja intensidad que nos machaca todas las resistencias.

Así que por mí y los que son como, yo he pensado unas normas para intentar minimizar los efectos adversos de los veletas. Por favor, si algún veleta pasa por aquí y las lee, que las comparta con el resto de los de su especie, a ver si hay suerte, las empiezan a cumplir y adelantamos algo. Al lío.

1.-Si eres un veleta, ponte un cartel bien grande y fosoforito para avisarlo, como los chalecos reflectantes que se usan en los accidentes de tráfico. Que el que se cruce contigo sepa lo que hay: hoy tu color favorito es el azul, pero mañana será el naranja. El que se quede a tu lado, que se atenga a las consecuencias.

2.-Como siempre va a haber algún pobre incauto que decida quedarse a sufrir, por lo menos mántenle informado de tus cambios repentinos. Para que lo sepa, más que nada. Si pudiera leerte el pensamiento, no estaría dejándose llevar por tus continuas idas y venidas, sino adivinando las acciones que van a subir su cotización en bolsa, invirtiendo en ellas y en un plis disfrutando en la playa de su feliz vida de millonario. Tú ve cambiando de opinión, que ya si eso él te espera tumbado en la hamaca y bebiéndose una piña colada.

3.-Explica tus cambios de opinión, a ver si el pobre incauto logra entenderlos y adaptarse a ellos con mayor facilidad. Que sí, que eres un veleta y tal, pero alguna razón habrá para que ahora pienses distinto, ¿no? Pues explica, tronco, explica, que para eso tienes boca.

Bueno, éstas para empezar y ya se me irán ocurriendo más. Veletas del mundo, por favor, cumplidlas, que si no, sois un auténtico coñazo.

10 comentarios:

  1. Ciclotímicos es la palabra médica, es una enfermedad.

    ResponderEliminar
  2. Pues un consejo para los que están con un veleta: Ya sabes como son, no te extrañes de sus cambios.
    Yo no soy un veleta, soy más bien de ideas fijas, como un pararrayos, ahí, caiga lo que caiga. jejeje

    ResponderEliminar
  3. Pseudo, ¿y porque están enfermos hay que perdonarles? XDDDDDDD

    Papacangrejo, saber que las cosas son como son no aminora sus efectos negativos. Al menos en algunos casos.

    ResponderEliminar
  4. No puedo con los veletas; para mí con el punto 1 sería suficiente, a partir de ahí saldría huyendo XD.

    ResponderEliminar
  5. Yo soy un veleta en un terreno de mi vida: el parejil. Bipolar no, tripolar por lo menos. Tomo nota de todos tus consejos :p

    ResponderEliminar
  6. Lo peor que le pasa a un veleta es que pronto se dan cuenta los de rededor y entonces su palabra no vale un comino.

    ResponderEliminar
  7. Llegaste tarde. Fui veleta, pero me quité. Y mucho mejor, oiga. Pero me lo guardo por si recaigo, venga.

    Salud y saludos.

    ResponderEliminar
  8. ¡Uy!
    Ahí le has dao!

    Tengo una colección de chalecos antibalas para veletas:
    Para el que no sabe lo que quiere, para el que lo sabe y no le da la gana ser claro, para el "perro del hortelano", para el del tira y afloja...
    ¿Sigo?

    A otro perro con ese hueso.
    A los ciclotímicos que los aguante su abuela.

    Lo has bordao, niña.

    ResponderEliminar
  9. Ay los veletas... cuánto ganaríamos todos los demás si avisasen de que lo son. Me apunto a que se anuncien con un chalequito o con una flechita que les señale permanentemente, jeje.

    ResponderEliminar
  10. Doctora, tratándose de veletas, buena decisión.

    Take Your Mama Out, los veletas parejiles son los peoresssssss!!!!!! Cambia! Cambia por favor! XDDDDDDD Bueno, y si no cambias, pásales las normas a los de tu especie, anda, hazme el favor ;P

    Patito, no siempre es fácil darse cuenta...

    ex seminerista ye-ye, es una gran noticia que te hayas "quitado de ser veleta", es mejor para ti y para los que te rodean. No recaigas! ;P

    Fiebre, ¿tienes chalecos antibalas para veletas? Me prestas uno? ;P

    Sonix, ¿verdad?

    Speedy

    ResponderEliminar

¡Eh, no te vayas sin decir nada! No tengo el superpoder de leerte la mente.