viernes, 19 de julio de 2019

Tu yo del futuro cercano

Este finde he visto en la playa a tu yo del futuro. Se ha debido abrir un portal temporal de poco recorrido porque no era un tú muy distinto a ti, te sacaba unos 5 o 7 años. Debía ser tu yo del futuro cercano.

Le (te) he reconocido enseguida porque mantiene ese cuerpazo que tienes ahora, esos brazacos, esos marcadísimos abdominales y sobre todo esa sonrisa de 1000 vatios que podría iluminar una ciudad de tamaño medio. Supongo que esa es tu marca de identidad, también la tendrá tu yo del futuro lejanísimo. Ojalá. Lleva el mismo peinado que tú, un tupé al estilo Felipe (el amiguito de Mafalda) inesperadamente repoblado, así que intuyo que de aquí a una década los tratamientos capilares habrán mejorado un montón.

(Y ahora, POR FAVOR, no sigas leyendo si eres de los que te gusta mantener la emoción y la sorpresa en las series porque vienen unos spoilers como castillos)

¡¡¡¡ SPOILER ALERT !!!!

(No lo puedo poner más grande ni más destacado, la que avisa no es traidora)

Tiene dos niños preciosos, dos mellizos (chico-chica) movidísimos (de tal palo, tal astilla) que a sus dos añitos ya apuntan maneras de ser dentro de nada tan atléticos como tú.Y por si esa sonrisa iluminadora me había dejado alguna duda, al verle jugar con ellos, cuidarles, abrazarles, he tenido la absoluta certeza de que eras tú. Sé que serás así con tus hijos porque ya se te nota con tu sobrino: no se sabe quien disfruta más haciendo el gamberro con el otro, si el adulto o el enano...

Tu yo del futuro cercano está en la playa con una chica. No es la madre de los mellizos y tampoco se os ve excesivamente unidos. No sé si es un ligue reciente o uno al que le quedan dos telediarios, sólo sé que si alguna vez veo a tu yo del futuro lejano espero que no esté con ella. No hace castillos para no mancharse de arena, no salta olas con los pequeños y su creatividad e imaginación brilla por su ausencia. Pegáis cero.

Y me dan ganas de levantarme de la toalla para ir a decirle a tu futuro yo lo mismo que le diría a tu yo del  presente: que sé con quién deberías estar. Con alguien que pueda hacer un edificio de tres plantas con toda la tierra que se saca del bañador cuando vuelve de la playa. Con una TODera de las que se apañan en TODAS las situaciones: que lo mismo juegue a las palas (o lo intente), que mantenga el equilibrio de 4 pequeños piratas encima de una colchoneta gigante en forma de porción de pizza, que se invente un cuento de hadas moderno en el que Cenicienta triunfa en el mundo de los negocios y pasa de bailes, toques de queda mágicos y zapatitos de cristal y que atienda las micro-crisis alimentarias playeras de mitad de mañana con trozos de sandía, melocotón y naranja porque quién tiene ganas con estos calores de ponerse a hacer bocadillos. Con alguien a quien a veces le sobre valor en los naufragios y le falte en los vasos de agua (no le vendría mal una duchita de serenidad, me temo) pero que aún así sea un buen marino en la tormenta, alguien con quien se pueda contar cuando la cosa se pone chunga. Con alguien  pelín despistada, un poco caótica y bastante desastre pero en tu mismo canal de locura mental y con la suficiente imaginación para ver a tu yo del futuro y reconocerle.

Si no se te ocurre a nadie yo tengo algunas ideas...

4 comentarios:

  1. Hace tiempo leí que los hombres no suelen cambiar el peinado desde la adolescencia. Si la alopecia se lo permite, claro...

    Pero vamos, una visita del futuro no sirve de nada si no te traen un bote de detergente definitivo. Si la gente del futuro no nos ayuda a quitar las manchas de la ropa, qué sentido tienen las máquinas del tiempo? :P

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  2. Pufffffff
    juego arriesgado el de imaginar a alguien dentro de diez años,
    La vida no solo nos roba el pelo
    a veces nos roba la sonrisa.

    Beeeeesos.

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  3. No me puedo imaginar que exista alguien tan guay en la faz de la tierra para ese hombre...

    Besos!!!

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  4. Doctora, totalmente de acuerdo, no es una visita del futuro en condiciones si no trae detergente. Aunque, bueno, técnicamente no venía a visitarme a mi, estaba el pobre a sus anchas en la playa y yo me di cuenta...Así que se lo podemos pasar, ¿no? jajaja

    Lo que Leo, bueno, ya que nos ponemos a imaginar, imaginemos que no nos han robado la sonrisa, ¿no? jajaja

    Maribel, si tú no te lo puedes imaginar, yo tengo imaginación por las dos y se me ocurre un nombre que empieza por S y acaba por peedy jajajaja

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¡Eh, no te vayas sin decir nada! No tengo el superpoder de leerte la mente.